Tu Alpha

Extra #1

No existe nada mejor para el cuerpo, que un merecido descanso, donde puedes sentir los rayos del sol bronceando tu piel, mientras la brisa va al ritmo de las olas del mar, a la vez que tus ojos pueden disfrutar muy feliz de los festines de cuerpos tonificados que se van paseando por la zona.

No cabe duda que en este sitio existe un perfectamente desarrollado paisaje.

Al estar acostada en esta silla de playa, tan solo utilizando mi vestido de baño, mientras todo mi cuerpo puede sentir como unas cuantas miradas se quedan fijas en lo que hago o no, una que de inmediato puedo intuir que son de deseo, son bastantes gratificantes.

Si bien es cierto que cada mujer debe tener su autoestima bien formado, sin ningún complejo posible, sin importar lo que puedan opinar los demás ya que a nadie le debo nada para anden opinando de lo que no les interesa.

Recibir ciertas miradas positivas siempre puede satisfacer enormemente el ego.

Después de unos cuantos segundos mas, decido que es buen momento para girarme y broncear la siguiente parte de mi cuerpo, lastimosamente no duro nada intentando esa cuestión ya que en un dos por tres, tras escuchar un interesante gruñido, siento unos deliciosos labios posarse en mi nalga derecha, que le dan paso a una ya conocida lengua que comienza a moverse en círculos sobre mi piel, consiguiendo que de mi boca salga un encantador gemido.

Sentir como tan solo su boca hace maravillas en todo mi cuerpo, mientras mi manos aprietan con fuerza la silla de playa en la me encuentro es enriquecedor, mas al saber la cuestión por la cual el futuro Alpha esta demostrando tales arranques, unos que llega a culminar en cuanto sus dientes se hacen notar en mi piel, sin llegar a perforar por completo la zona.

- esto es fantástico - espeto al levantar la cabeza y observar la obra de arte que ha realiza el hombre de ojos grises que no para de sonreír.

- eso digo yo, no cabe duda que combina con tu vestido de baño, te hace ver tan encantadora, y a la prohibida para la manada de hombres que creen tener una oportunidad con mi mujer.

Diosa Luna, ¿Por que tenias que hacer a estos hombres tan posesivos y celosos?

"creo que no estamos en condiciones de criticar, menos cuando nos ha gustado lo que ha hecho y dicho" objeta mi loba, haciendo que al ver su falta de apoyo a mi parte, cierre nuestra conexión.

Volteo mi rostro para observar como nos hemos convertido en la fuente principal de miradas de unas cuantas personas, pero ahora hay mas femeninas que masculinas, unas que no paran de devorar con sus ojos al hombre que no borra la sonrisa de su rostro.

- me parece que este comportamiento es muy irracional - suelto mientras voy levantando un poco mi cuerpo de la silla de playa, para quedar sentada en esta, muy cerca de mi mate.

- no me digas hermosa, ¿desde cuando te has vuelto racional?

- desde siempre, he aprendido a no dejarme llevar por los instintos.

Al parecer, tras soltar esas ultimas palabras, le causan mucha gracia a Asher, ya que ríe por unos cuantos segundos antes de tenerlo acercándose aun mas a mi cuerpo, mientras va llevando una de sus manos a mi rostro, comenzando a pasar sus dedos por mis mejillas, dejando pequeñas caricias hasta que poco a poco va llegando hasta mis labios.

- mi hermosa, me parecen muy curiosas tus palabras, mucho mas cuando hace menos de dos horas cierta mujer dejo varias marcas de chupones por mi espalda, al igual que pecho.

Mis ojos bajan directo a la ultima zona nombrada, donde no puedo evitar sonreír al ver lo bien que le quedan, el perfecto contraste que su piel hace con el color de estas marcas.