Tu Alpha

Capitulo 4

Las sensaciones son abrumadoras, embriagantes, poseedoras de todo mi control, mas si sus manos firmes son las causantes de ello, aunque este por  encima de la ropa en mi cadera, no puedo evitar jadear, con tan divino toque.

Su rostro perdura en mi cuello, respira mi esencia, el olor que desprendo, el cual demuestra nuestra conexión de mates, las decisiones inexplicables de la diosa luna, que ahora solo hacen que él junte sus labios con mi piel, dejando varios besos húmedos por el lugar donde hace mucho tiempo poseía una marca, la cual desapareció con el causante de eso.

- Asher - jadeo cuando de un movimiento por parte de su pelvis golpea nuestras entrepiernas, haciendo que sienta un gran miembro, listo y despierto, el cual por encima de la ropa me sorprende su tamaño, al saber que es mas grande que todo lo que he conocido.

- hermosa... hermosa ...- empieza a dejar un camino de besos por mi cuello hasta llegar a mi mejilla derecha donde sigue con su labor, queriendo llegar a mi oreja - mil veces hermosa...- susurra con voz gruesa antes de que chupe el lóbulo de mi oreja.

Mis manos inevitablemente van a su pecho, palpando esos abdominales por sobre la ropa, unos que se que tiene, pero que lamentosamente, trae a mi el recuerdo de porque lose.

Mi mente se nubla por tener la imagen de vuelta, queriendo olvidarla por verlo aquí conmigo, reclamándome, pero ese recuerdo es mas fuerte, el cual me motiva darle un buen empujón a mi mate, que lo hace apartarse de mi, con su rostro perplejo por mi acción repentina.

- no - es lo primero que suelto antes de intentar acomodar mi vestido y mirar como su respiración, al igual que la mía esta bastante irregular.

- hermosa, ¿que haces? - pregunta dando un pequeño paso en mi dirección, que me hace tragar saliva.

- ¿que haces tu?, como puedes actuar así cuando... - respiro hondo - cuando te he visto con otra, montándote, y tu muy feliz de ello - espeto, sintiendo como no debería reclamarle, después de todo él merece disfrutar su sexualidad, y no sabia de mi, pero... pero mi estúpido corazón no me deja actuar racional.

Asher mira a varios lados con vergüenza latente, antes de volver a fijar su mirada en mi con determinación y arrepentimiento.

- hermosa, yo... lo siento... siento mucho lo que viste, créeme, lo hago, corrí detrás tuyo para que no te fueras, queria... por dios quería hacer y decir tantas cosas, pero te fuiste...

- ¿acaso pensabas que seguiría atenta a como te la follabas?, ¿querías que te hiciera barra? - replico con el enojo y tristeza latente en mi voz.

Asher da otro paso hacia mi antes de volver a negar.

- no, por supuesto que no hermosa, eres mi mate, y yo quería aclararlo, se que la forma en como nos encontramos no fue de lo mejor, pero eso no implica que no tengamos un vinculo, y que me aborrezca por haber sido el causante de las lagrimas que soltaste ayer - da otro paso y yo me tenso al ver como sus palabras ya me quieren hacer caer.

- no te acerques mas, no... no lo hagas - él sonríe antes de dar otro paso hacia mi, y yo, pues que puedo decir, mi loba ya lo perdono, así que no colabora con la causa.

- vamos hermosa, soy tuyo, aquí me tienes, reclama lo que te pertenece - dice dando otro paso y causando una electricidad por mi cuerpo, que me motiva a girarme en mi puesto rápidamente, queriendo buscar la puerta para salir de aquí.

No lo consigo ni por asomo, ya que una mano musculada empuja la puerta cuando la abro, dejándome inmóvil en mi puesto.

- no te vayas hermosa, no asi... yo... diablos, luces hermosa con ese vestido - escucho como un gruñido se hace presente en su garganta, lo que me hace girar en mi puesto, quedando de frente con él, admirando como sus ojos ya se encuentran oscuros - quiero comerte...