Tu Alpha

Capitulo 23

Quiero controlar a mi loba, en verdad deseo decir que a mi edad es posible retener los impulsos, saber tomar las decisiones con calma y actuar como una persona razonable, pero al ver como todas las mujeres no paran de comer con la mirada a Mi Alpha, me es casi imposible no salir directo donde el ojos grises se encuentra intentando salir de la montonera de mujeres que lo retienen.

No se como apareció mi gran fuerza, o como logre mover a tremendo hombre de gran tamaño rumbo a los baños de hombres, sin tropezarme por ningún segundo a pesar de tener tacones, solo se que en estos momentos me encuentro cerrando la puerta con candado, evitando que cualquiera pueda entrar.

" necesitamos privacidad para lo que va suceder" dice Tania por medio de nuestra conexión, algo a lo cual no puedo estar mas de acuerdo.

Tomo un respiro para así girar a observar como Asher me mira con una muy exquisita sonrisa en su rostro.

- te juro que no toque ninguna de ellas - afirma mientras coloca sus manos en son de paz - ellas me rodearon y yo estaba intentando que se alejaran.

Al escuchar sus palabras comienzo a dar pasos lentos para llegar hasta donde se encuentra.

- así que eres un inocente - espeto con una media sonrisa justo antes de posar mis manos en el pecho de mi hombre.

- por supuesto, se que solo le pertenezco a una mujer - comenta a la vez que lleva sus manos rumbo a mi cintura, para así permitirle tomar algo de posesión de mi cuerpo.

Le dedico una mirada a esos jugosos labios que posee mi mate, para luego acercar mi rostro rumbo a su mandíbula, y hace dejar un húmedo beso en dicho lugar, uno que causa un gruñido de satisfacción por parte del futuro Alpha.

- es bueno que lo sepas, pero no me gusta que miren lo que me pertenece como si no tuviese dueño - suelto mientras paso mi lengua por su manzana de Adan, todo muy lento, a la medida que mis manos van bajando por su camisa, hasta llegar a su cinturón.

- hermosa... - gime Asher mientras lleva sus grandes manos a mi trasero, para así tomar y apretar mis dos nalgas de una manera que causa que nuestras dos entrepiernas se alcancen a frotar por sobre la ropa.

" que delicia" ronronea mi loba.

Mi boca llega justo a ese intermedio entre su cuello y hombro, un sitio en el cual mi lado posesivo me tenta a dejar una marca, una que no es muy usual en los Alpha, debido a que cuando poseen su alma gemela, no es necesario realizar la marca en el hombre, pero mis celos y ganas romperles el cuello a todas las mujeres que lo morbosearon me hace querer clavar mis colmillos en su piel.

- Mi Alpha... - lo llamo con voz seductora, causando que Asher baje su rostro para conectar sus ojos con los míos, mientras sus dedos se adentran por la parte posterior de mi vestido, consiguiendo tocar la piel de mis  piernas - quiero marcarte.

Puedo ver algo de sorpresa en el rostro de mi mate, pero esta se confunde con la excitación causada por mis dedos sobre su calzoncillo, paseándose tortuosamente por su miembro, uno que se encuentra muy tenso y despierto.

- quiero dejarle claro a todos que eres mío, quiero que sepan que me perteneces, que hueles a tu dueña - murmuro cuando llevo mis labios muy cerca de los suyos, para si rozarlos, tentarlos, volviendo nada su autocontrol - que yo soy la única que puede comerse esto de todas las maneras posibles.

Saco su riquísimo miembro de esa tela que no me permite tener el contacto piel con piel, uno que al momento que comienzo a mover mis manos de arriba hacia abajo, causan bastantes gruñidos de mi Alpha.

Pronto siento como la mano de mi hombre se encuentra directamente en mi tanga, presionando con sus dedos justo en mi clítoris, rozándolo de tal forma que causa que me comience a frotar contra su mano.