Choi Yuna
A quién iba a engañar. Que me gustaran los retos, no significaba que me besaría aquí mismo con él. ¿O sí?
Me estaba empezando a sentir agitada. Quería moverme un poco, pero era como estar atrapada. Alcé un poco mi mirada, para ver como sus ojos nunca se apartaron y maldición, notaba su respiración. Tenía sus labios levemente abiertos y podía confirmar que no aguantaba las ganas.
Tragué saliva con fuerza, y di un par de pasos hacia delante, sintiendo la manera en la que mis zapatos chocaban con los suyos. Agradecí que, al menos, no se alejó al tener mi cuerpo rozando con el suyo, en cambio, ladeó su cabeza con una maldita sonrisa.
Su mano fue a parar a mi cintura, justo donde mi cárdigan ya no llegaba. Sentía mi piel erizarse por lo frío de sus dedos, además de sen
sentir como rozó sus labios contra los míos.—Estás jugando conmigo.
Susurré, con la poca fuerza que me quedaba. Estaba de broma.
—¿Quieres que te bese?
Al diablo. Pasé mis manos sobre sus hombros y cerré mis ojos. Atrapé sus labios, besándolo. La manera tan suave en que tomó el ritmo me hizo perder la cordura. No tuve la oportunidad de reaccionar, parecía que yo no era la única necesitada. Tomó mi rostro con fuerza, para luego enredar sus dedos en mi cabello.
Nos detuvimos un poco, solo para tomar aire. Me di cuenta de que sus labios ahora estaban de un color rosa, tirando a rojo, a causa de mi labial. Era tan atractivo, que volví a sentir un cosquilleo en mi estómago y me abalancé a sus brazos de nuevo.
La manera en la que abrió su boca, me cautivó a hacer presencia de mi lengua. Su mano, que estaba en mi cintura, bajó un poco para quedarse sobre mi cadera, mientras que la otra tomaba con un poco de fuerza mi cuello. Movía su cabeza, profundizando aún más el beso, sintiendo que era él mejor que había tenido.
Estaba compartiendo saliva, cuándo dije que no quería hacerlo con nadie, pero, esto no tenía nada que ver, no había pensado que este tipo de beso le hiciera daño a alguien.
Toqué su pecho, y vaya que tenían buenos pectorales. Seguro que sin ese suéter se le vería mejor. El ambiente pasó de estar caliente a estar frío, literalmente, por qué el cubo que se estaba llenando de agua, se rebalsó y cayó hacia nosotros, mojándonos.
Me espanté, al igual que Namjoon que tomó mis brazos para hacerme a un lado. Quedamos empapados, pero él un poco más que yo.
Escuché su pequeña sonrisa mientras se acercaba al cubo para ponerlo bien. Regresó a mí, viéndome de pies a cabeza, yo hice lo mismo con él. Se había mojado todo el torso, provocando que su suéter fino se pegara a su piel.
—Deberíamos irnos, puede entrar alguien.
Mencioné, suave a lo que asintió. Yo solo me había mojado de cintura para abajo y era incómodo caminar con estos zapatos así. Namjoon tomó entre sus manos el cubo, quitándolo del lavamanos. Fuimos hasta la puerta, hasta que recordé que sus labios estaban más rojos. Lo detuve y volví a quedar frente. Subí mi mano, para tocar con cuidado sus labios. Eran tan deseosos verlos.
ESTÁS LEYENDO
WARM | KIM NAMJOON [Sinful #2]
FanfictionPor qué ese día en que 𝗖𝗵𝗼𝗶 𝗬𝘂𝗻𝗮 olvidó su cuaderno en la biblioteca, no sería una coincidencia, ni tampoco ver al hombre de hoyuelos que se volvería el control del actuar de su cuerpo. Y mientras se avecinaba la avalancha de contratiempo...