RECHAZADO POR UNA OMEGA

CAPITULO ONCE

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Sus padres no podían ver a Sasuke por ningún motivo.

El timbre volvió a sonar.

--- ¿Quién es? --- Cuestiono su madre desde la cocina.

--- Eh... es... --- Dijo sin tener la mas mínima idea que decir --- Mierda --- Espetó entre dientes.

<< abre la puerta, Saku, no voy a decirle nada a tus padres, confía en mi >> Proyecto en la mente de la pelirosa.

<< Si dices algo de que somos compañeros, te mato >> sentencio la Ojijade

<< lo juro >>

El pomo de la puerta giro y la figura de Sasuke se hizo visible.

--- Buenos días, lamento la interrupción. --- Declaro el azabache, al mismo tiempo que los padres de Sakura se acercaban a la puerta y de inmediato inclinaban levemente sus cabezas en modo de saludo hacia el futuro alfa.

--- Alfa Sasuke, es un honor tenerlo en nuestro hogar, por favor, pase y tome asiento. --- Ofreció Kizashi

--- Por favor, no es necesario tanta formalidad --- Menciono Sasuke y Sakura lo miro sorprendida, jamás había visto aquella faceta tan ¿modesta?. --- Solo vine a pedirle ayuda a su hija con algunos temas referente a la universidad, si no fuera mucha molestia, claro.

--- ¡Para nada! no es ninguna molestia. --- Se apresuro Sakura a responder al mismo tiempo que empujaba suavemente a Sasuke hacia su vehículo ---- Yo iré por unas cosas mientras tu me esperas en el auto, ¿De acuerdo?

Sasuke sonrió.

--- Si, no hay problema. --- Respondió y Sakura de inmediato saco las manos de su cuerpo y corrió hacia su habitación.

Los padres de Sakura observaron completamente sorprendidos por la actitud de su hija y a pesar que tenían muchas preguntas, ambos decidieron abstenerse de preguntar.

Las manos de la Ojijade picaban y ardían, hambrientas por volver a tocar la piel de su mate. y ha decir verdad, no había pensado cuando le puso las manos encima, solo quería alejarlo de sus padres, pero ahora se daba cuenta que el tocarlo había sido un error.

Un delicioso error.

CAPITULO ONCE:

Sasuke yacía al interior de su vehículo cuando la Ojijade salió de su casa a toda velocidad, pero sus pies se detuvieron de golpe al ver la sonrisa que el azabache tenia en su rostro, era una sonrisa completamente honesta y divertida, y jamás lo había visto así.

Su corazón latió con fuerza.

Y de inmediato negó aquel palpitar.

Se obligo a poner sus pies en marcha hasta que llego al jeep todo terreno del azabache.

--- ¿Qué es lo que quieres? --- Cuestiono con voz fría, las manos aun le picaban y su corazón latía con demasiada fuerza, tenia que alejarse.

--- Sube, necesito tu opinión sobre algo. --- hablo a través de la ventana abierta mientras encendía el motor del vehículo

--- ¿De que se trata?

--- Lamentablemente no es algo que pueda preguntar, tengo que llevarte ahí para que me puedas dar tu opinión, así que... --- Menciono acercando su mano a la puerta del copiloto y abriéndola para ella, pero Sakura no se movió. --- Ok, entiendo. --- Declaro con algo de frustración en su voz.