Capítulo 7 : Confesiones Parte I

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Will estaba teniendo un buen día hasta ahora. Hopper había decidido organizar una pequeña reunión, aprovechando que toda la pandilla Upside Down estaba libre durante el fin de semana. Había hablado con los padres de los invitados a la fiesta, quienes parecían agradecidos de no tener hijos. Will estaba charlando con Vickie, Eddie y Jonathan sobre la banda reciente que el mayor había formado con otros muchachos del pueblo, pero aún no tenían un buen nombre para ella.

Desde el debate del Hellfire Club, Munson no quería otro problema, por lo que estaba teniendo cuidado con el nombre. Sin embargo, Will no estaba prestando atención del todo a su amigo; en cambio, estaba mirando furtivamente a Steve, quien estaba hablando con Nancy, Hopper y Robin.

Steve notó que Will lo miraba y le guiñó un ojo antes de volver a su conversación.

“Entonces, ¿ya no estamos siendo sutiles?” susurró Vickie a Will.

Él sonrió y le murmuró “más tarde”. Hizo un gesto de que mantendría la boca cerrada y continuaron hablando con Jon y Eddie. Dustin y Max pronto se unieron al grupo.

“¡Bueno, necesito ayuda con las hamburguesas!” gritó Hopper. Jonathan y Joyce fueron inmediatamente a ayudar al sheriff, mientras que Vickie y Will se quedaron un poco atrás para cotillear.

“Entonces… ¿lo harás esta noche?” preguntó Vicky.

Will asintió con la cabeza con una sonrisa tímida. “Estoy nervioso, pero es hora. Primero se lo diré a mi familia y luego a los muchachos”, susurró.

“¿Y qué hay de él?” preguntó Vicky.

“Le dije que viniera más tarde, que lo llamaría. Solo quiero asegurarme de que todo salga bien, ¿sabes?” Respondió Will, sonando preocupado.

“Todo va a estar bien”, dijo Vickie. Luego resopló al ver que Mike casi tropieza con Steve y siguió caminando como si nada hubiera pasado. “¿Todavía está en su ‘fase de odio a Steve’?”

Will puso los ojos en blanco. “Y me está poniendo de los nervios. Ahora, lo único que hace cuando está en la misma habitación que Steve es mirarlo. Quiero estrangularlo… quiero decir, mira a Nancy. Ella está hablando con Steve casualmente, si es su ex… no entiendo, para ser honesto”, dijo Will.

“¿Crees que quizás Mike esté celoso?” preguntó Vicky. Will frunció el ceño. “No románticamente celoso, solo, ya sabes…” se desvaneció.

Will se encogió de hombros. “No sé, ¿tal vez? Es solo que Steve literalmente se disculpó con todos, y nunca nos hizo nada malo… Simplemente no lo entiendo”.

Su conversación cesó cuando Hopper llamó a todos a comer. Murray estaba en primera línea, discutiendo con Max y Lucas. Fue gracioso verlos discutir. La comida estuvo increíble, y como postre, Teresa había enviado un pastel de arándanos para todos. Vickie estaba comiendo de su plato cuando un poco de salsa cayó sobre su blusa.

“Diablos, esto se va a manchar”, se quejó Vickie.

Joyce miró a la niña lamentable. “Oh, cariño, tal vez Jane pueda prestarte algo”, dijo Joyce, y su hija asintió con la cabeza.

Will resopló, sabiendo que el estilo de su hermana había mejorado pero aún era demasiado colorido para Vickie. Él se paró. “Vamos, Vickie, te prestaré una de mis camisas a cuadros”, se ofreció.

La pelirroja miró con aire de disculpa a El, quien se echó a reír. “Está bien, también le he robado la ropa”, dijo.

Vickie siguió a Will a su habitación e inmediatamente fijó sus ojos en el mono de peluche. “Oh, míralo. Se parece al mini Steve”, dijo Vickie.

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