Mujeriego• Kim Taehyung.

Cap.9

Narra Taehyung

Llegó tu hora Taehyung

La fiesta estaba lo suficiente movida para yo hacer de las mías. Si que habían muchas chicas jodidamente preciosas y buenas.

No voy a mencionar que ya había gente borracha en este lugar porque ¿sinceramente...? Me da pena ajena.

Olvida eso Taehyung. Ve a divertirte

Mis ojos se encuentran con el dueño de la fiesta. Me acerco con una sonrisa en el rostro y palmeo mi mano en su hombro.

-—¡Bro! Tu fiesta está increíble—lo veo sonreír

—Si, ¿eh? 

De la nada una chica llega. Cuando pienso que es para mí, agarra al chico de la camiseta y lo arrastra con ella. Vale, eso me dolió

—¡Disfruta!—es lo último de su parte que escucho antes de alejarse de mi en la barra. 

Sigo perplejo viendolo todo. Cuánto me gustaría que la preciosura de Tn estuviera aquí. Me la cogería en este mismo lugar.

Aleja tus fantasias. La chica hasta te odia

Golpe duro.

-—Hola—un tono coqueto resuena en mis oidos. Me giro y a mí lado hay una chica de cabello castaño corto con una mirada bastante tentandora—¿que tal?

Se a que viene esto

—Mejor ahora que estás aquí, hermosura—me apuro en darle un sorbo a mi soju

Mirándolo bien. No está mal. Tiene un cuerpo bastante bueno para unos minutos

—¿Estás aburrido?—vaya. Los dedos de ella acarician mi sien sin previo aviso alguno.

—¿Tienes algo en mente?

Toma mi mano y me hace caminar. No sé la dirección

—Y después bailamos...

Estamos frente a un cuarto. Se a lo que se refiere. No dudo un segundo en asentir y casi la empujo hacia adentro

—Vaya nena, tus intenciones han sido más rápidas que las mías—cierro la puerta con pestillo

—Se lo que quiero—sonrie dirigiendo su mano a un lugar peligroso de mi cuerpo. La tomo rápidamente

—Solo 3 minutos—advierto— Recién empieza la fiesta.

Ella asiente y la suelto. Comienza a besarme en lugar de eso y luego hace de las suyas.

(...)

Sigo bailando con la chica cuyo nombre no tengo idea de cuál es. Si se lo preguntan, si, ya hemos follado. Se ha quejado porque terminé muy rápido pero le advertí.

Quien manda soy yo.

-—Oye, vengo ahora, iré a buscar algo de beber—advierte. La dejo ir y me quedo solo.

El cuerpo de mi mejor amigo lo veo llegar a mi. Vaya, cuánto esperé por ese idiota.

—Joder, ¡¿Dónde mierda estabas?! 

—¿Hace unos minutos? Cogiendo—contesto como si nada. Me encojo de hombros.

—¡Apenas llegaste canaya!

No sé sorprendan. Es normal entre nosotros ofendernos

—Si, normal.—no entiendo su sorpresa—¿Y tú qué?

—Vine con una chica. Quería asegurarme de que no le sucediera nada

Sonrío en cuanto me doy cuenta.