1) UNA VIDA FELIZ

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—¿Regular o descafeinado?

—Regular porfavor.

—¿Algo más?

—Así está bien, gracias.

—De acuerdo, aquí tiene. Si necesita algo más no dude en llamarme.

—Gracias

Así transcurrían sus tardes noches, entre olor a café, postres y Jazz. ¡Que buen gusto tenían esos ancianos!

'Muero de sueño, ya solo faltan 20 minutos para cerrar'

Daban casi las 11 de la noche y el café en el que trabajaba Denisse casi cerraba. Las máquinas se empezaban a apagar y solo faltaba una cuenta por cobrar.

'Solo faltan 10 minutos'

—Su cambio. Vuelva pronto.

—Gracias.

—'Solo faltan 7 minutos'

—Denisse.

—...

—¿Denisse?

— ...

— ¡Denisse!

—...Madame!?

—Linda porfavor ya ve a dormir, mañana es martes. ¡Tienes examen! Yo me encargo de cerrar.

—Madame Fontaine, realmente se lo agradecería.

—No te preocupes querida, la escuela es primero.

Madame Fontaine, la dulce señora francesa dueña de Fontaine's Coffee junto con su marido. Los ancianos jubilados migraron del norte de Francia a Sur Corea para cumplir su sueño de abrir un café en Seoul. ¿Porque lo hicieron? Bueno, Denisse solo pensaba que hay gente con sueños raros.

Los Fontaine eran realmente amables con ella. La razón podría ser que solo tuvieron un hijo pero murió apenas cumplió los 13 años de edad y empezaron a ver en ella, otra migrante, un consuelo a su perdida.

—Hasta mañana Madame

—Descansa linda

'Mañana será un gran día'

Se acostó a dormir pensando en el día que le deparaba. Las inscripciones para el festival empezarían y ya tenía su canción lista, la habia preparado con bastante tiempo ya que era su primer festival y estaba muy emocionada.

Denisse sentía que su vida era perfecta.

Vivía en un pequeño departamento que su abuelo le había regalado en vida, justo arriba de la cafetería en la que trabajaba, tenía un trabajo genial con jefes geniales, estudiaba canto en la preparatoria Jaewon y los sábados daba show en vivo en el café.

De vez en cuando echaba de menos a sus padres, pero al mismo tiempo entendía que la muerte es parte de la vida. Les lloraba pero no vivía para extrañarlos y su recuerdo le daba felicidad, no se la quitaba.

No tenía metas en la vida, realmente no quería nada más, más que graduarse de preparatoria y seguir trabajando en Fontaine's Coffee y seguir cantando los sábados por dinero extra. Para sorpresa de todos ni siquiera soñaba con convertirse en una famosa cantante y ganar mucho dinero, de hecho este era un tema de conversación frecuente con sus compañeros de clase y la respuesta siempre era la misma de su parte: "tengo todo lo que necesito"

Quizás el único problema es que no había transporte de su casa a la escuela y tenía que caminar por media hora todos los días de ida y vuelta. Pero esto no sería por siempre, uno no va a la preparatoria por siempre.

UNA CANCIÓN PARA LA BESTIA.           (Lookism)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora