María, la zoóloga, me enseñó sobre su filosofía personal: Vivir la vida sin remordimientos. Este lugar parece bastante peligroso, con los zombies en la noche, slimes en el día, Devoradores de Almas y la Corrupción... Tiene sentido el querer vivir sin arrepentirse, disfrutar la vida al máximo, todas las experiencias que el mundo puede ofrecer. Por eso me "visitó" en la noche. No es una mala manera de ver el mundo, para nada.
- O sea, la vida siendo tan corta, creo que no es bueno embotellar los sentimientos y no mostrarlos. ¿Se me entiende? Creo que parezco loca, ¿parezco loca? - Preguntó María.
- No, claro que no. - Respondí - Yo mismo casi me muero. Viéndolo de esa forma, ya no me da vergüenza admitir que creo eres una persona muy admirable y genial. Y me encantan tus orejas.
María me dio unas palmaditas en la cabeza. Me explicó que durante el tiempo en el que estuve en cama (dos días, en el primero me trajo aquí y en el segundo me lo pasé descansando) Dylan estuvo ocupado trabajando. Construyó la cabaña en la que estamos María y yo ahora, y él se quedó en otra cabaña más pequeña. Creo que es algo bueno, sería incómodo tratar de dormir los tres aquí. Sí, María se está quedando conmigo. Mejor dicho, yo me estoy quedando con María porque esta va a ser su casa, al menos por un tiempo.
- ¿Tu hermano no se preocupará por ti al ver toda la casa rota y que no estás allí?
- Oh, no te preocupes. Dejé una nota en casa ayer, mientras estabas durmiendo. O sea, mi hermano puede cuidarse solo, pero tú estás en cama, Dylan tiene un arquito todo chiquito... Creo me necesitan aquí we, jeje. Incluso traje mis libros y cuadernos para seguir con mi investigación... Cuando mi hermano regrese, no sé, tal vez podamos mudarnos aquí. Sería lindis, tener una pequeña comunidad.
Dylan entró, dejando entrar la luz del sol por la puerta. - ¡Hey, héroe! ¿Listo para ir a las minas? Tienes que volver afuera, practicar, entrenar... Hay muchas cosas que hacer - En sus manos, traía mi mochila.
- ¿Qué quieres decir? - Pregunté, incrédulo - Me perforaron los pulmones hace dos días, tengo miedo de que si me pongo a trotar se me van a colapsar y explotar.
- ¿De verdad? - Me miró con una sonrisa confiada en su cara - ¿Has intentado ponerte de pie?
- O sea, puedo intentarlo, si tantas ganas tienes de ver a un convaleciente sufrir... - Lentamente, me puse de pie sin dificultades. Estiré mis extremidades, caminé un poco en el sitio... Mis pulmones se sentían bien. Mi cuerpo se sentía totalmente genial, de hecho. Troté un poco en el lugar, di un pares de saltitos. María me dijo que tuviera cuidado, pero me sentía plenamente saludable. - A la mi- ¿Qué es esto? ¿Tengo superpoderes o algo así? ¿Es por ser el "héroe"?
- Algo así. - Dylan tenía una sonrisa de "te lo dije", pero era genial estar sano después de, ya saben, casi morir. No tiene sentido que me haya recuperado tan rápido, así que tal vez su historia debe tener algo de verdad.
- María, ¿quieres venir con nosotros? - Le pregunté.
- Mmm... O sea, me encantaría, pero tengo las piernas con fatiga muscular por todo el correr... Dylan, cuídamelo, ¿va? O sea, que no regrese tan madreado como la última vez que salió, jejeje.
- Claro, como no - Dylan sonrió ampliamente - De esta saldrá mejor, ya lo verás.
Le di un abrazo a María y me despedí. Ella dijo que no me preocupe, que cuidaría el lugar y aprovecharía para seguir con su investigación.
Dylan y yo caminamos un rato por el bosque. Él estaba callado, solo acompañándonos el sonido de la naturaleza. Fue un tanto incómodo, así que no pude evitar hablar.
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Terraria Girls: La Aventura
AdventureDespertando en una tierra nueva y extraña, un joven tratará de hacer una nueva vida mientras intenta descubrir quién es y por qué está aquí, al mismo tiempo si hay una forma de volver a donde sea que haya venido. Pero lo más importante, descubrir p...