Capítulo 4

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Ama estaba entrenando con las porristas mientras que Rivers la estaba esperando sentada en las gradas mirando su teléfono.

De pronto se escuchó un ruido fuerte haciendo que Rivers apartara la vista de su teléfono y mirara a las porristas.
Ama había hecho un salto desde la piramide que formaron todas.

-No mames, cómo verga no se lastimó?... -Preguntó Rivers al aire.

-Yo creo que es porque tiene mucha práctica. -Dijo alguien mientras se sentaba junto a Rivers.

-¡A la verga, me asustaste! -Rivers miró a la persona. -No puedes aparecer así de la nada, mira si me agarra un pinche infarto.

-Lo siento, creí que me habías visto.
Por cierto, me llamo Elizabeth pero si quieres puedes decirme Yuuki. -Yuuki sonrió amablemente.

-Un gusto Yuuki, me llamo Samantha, pero puedes decirme Rivers. -Rivers le devolvió la sonrisa. -Siento que ya te he visto antes...¿Eres la chica de la biblioteca? ¿La que se la pasa leyendo libros de suspenso y así? -Rivers miró a la chica.

-Oh, sí. Me encantan esos libros, tú eres la amiga de Rocio, verdad? -Habló Yuuki

-A mi también me gustan esos tipos de libros, y sí, soy la amiga de Chio. -Rivers le sonrió.

-Que bueno que te gusten, me alegra que alguien tenga el mismo gusto que tengo yo por esos libros. -Yuuki rió.

Rivers le devolvió la sonrisa y volteó su mirada para volver a mirar a las porristas, Yuuki hizo lo mismo.

-¿Estas esperando a alguien en particular? Es que nunca te he visto en las prácticas. -Yuuki dijo mientras seguía viendo a las porristas.

-Estoy esperando a Amairani, es que tenemos que hacer un trabajo. -Habló Rivers.

-Creí que se caían mal...Perdón por el atrevimiento. -Dijo Yuuki.

-Pues sí nos caemos mal, pero es nuestro castigo por tirarle una bola de papel al profesor. Fue culpa de Amairani igualmente. -Rivers al recordar eso, puso los ojos en blanco.

-Me imagino...Ella siempre me quita mi almuerzo, sigo sin saber por qué. -Dijo Yuuki algo deprimida mirando a Rivers.

-Lo siento mucho, si quieres te puedes juntar con mis amigas y conmigo. No te preocupes que ella no te va a hacer nada si estas con nosotras. -Rivers miró a Yuuki y sonrió.

-Claro! Me encantaría, muchas gracias, Rivers. -Yuuki sonrió también.

Ambas chicas escucharon unos pasos que se acercaban hacia ellas. Las dos chicas miraron al frente.

-¿Nos vamos? -Ama habló muy seria y le echó una mala mirada a Yuuki, quien agachó la cabeza.

-Sí, vamonos. -Rivers respondió de la misma manera para luego levantarse. -Nos vemos luego Yuuki, me encantó conocerte. Mañana te busco para el almuerzo, si? -Rivers hizo que Yuuki la mirara y le sonriera.

-C-Claro, mañana nos vemos, Rivers... -Dijo aún sonriendo.

-Oh, antes. ¿Me podrías pasar tu número? Así nos seguimos hablando. -Habló Rivers.

-Por supuesto. ¿Me permites tu teléfono? -Dijo Yuuki.

-Claro, ten. -Rivers le entregó el celular a Yuuki, quien puso su número de teléfono y le devolvió el celular a Rivers.

-Perfecto, en un rato te mandaré mensaje. -Habló Rivers.

Rivers le sonrió a Yuuki para luego mirar a Ama. -Nos vamos o no? -Habló Rivers.

-Pues sí, pero tú te tardas un chingo. -Ama puso los ojos en blanco.

-Ay, ya. No quiero escuchar tus quejas. -Rivers imitó la acción de Ama.

RIVALES  (Rivama)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora