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Hace una semana fue la lluvia de estrellas.

Desde esa noche, no paro de dibujar en mi cuaderno a dos personas mirando la lluvia de estrellas.

Estoy en mi habitación, sentada al escritorio, con mi cuaderno abierto, mi bolígrafo negro al lado, mis auriculares puestos, como siempre y un bonito atardecer a través de la ventana.

Estoy escribiendo sobre las nebulosas en el cielo, esas nubes gigantes de polvo y gas. Nunca había escrito sobre las nebulosas, al menos, no en ese cuaderno, así que hoy lo estoy haciendo.

Escribir sobre los astros y el espacio es una de mis vías de escape.

Nebulosas.

Aprendí sobre ellas cuando tenía trece años.

Nunca he escrito sobre este tema, así que, aquí estoy, supongo.

Una nebulosa es una nube gigante de polvo y gas en el espacio. Algunas nebulosas provienen del gas y el polvo expulsado por la explosión de una estrella moribunda, como una supernova. Otras nebulosas son regiones donde comienzan a formarse nuevas estrellas.

Aunque, eso lo sabe todo el mundo.

Existen varios tipos: las nebulosas de reflexión, las nebulosas de emisión, las nebulosas de absorción y las nebulosas planetarias.

Hay cientos de ellas. Por ejemplo, una nebulosa muy conocida es la nebulosa del Águila, ya que se parece a un águila volando.

Cualquiera diría que mi nebulosa favorita (sí, tengo una) es la nebulosa Cabeza de Caballo porque está incrustada en la vasta y compleja nebulosa de Orión, pero no.

La nebulosa del Corazón, o IC 1805, es una nebulosa de emisión que se encuentra ubicada a unos 7.500 años luz de distancia, en la constelación de Casiopea. Se llama así porque parece un corazón.

En las zonas centrales de la nebulosa las nubes de polvo toman figuras debido a los vientos estelares y a la radiación de una gran variedad de estrellas masivas calientes. Estas estrellas forman parte de un cúmulo de estrellas jóvenes, llamado Melotte 15, de hasta 1,5 millones de años.

En la nebulosa del Corazón existe otro cúmulo abierto asociado, llamado Berkeley 65. Todos estos cúmulos estelares forman parte de un gran complejo de nebulosas que se encuentran en el Brazo de Perseo, el mayor brazo espiral de la Vía Láctea.

Podría tener razones para que sea mi favorita, pero en realidad no las hay. Simplemente, es mi favorita. Nunca me he parado a pensar las razones.

Supongo que, ya que la astronomía me hace feliz, saber que hay una enorme nebulosa en forma de corazón me define.

Es como si fuera una especie de referencia.

Corazón a corazón.

Es increíble lo inmensa y maravillosa que es la astronomía.

Ayer vi la lluvia de estrellas.

Con Kayden.

Ahora somos amigos.

Y me parece muy atractivo.

Pero solo es atracción.

Nada más.

Y nos besamos hace poco.

Pero solo fue un beso. Y un poco de manoseo.

Sí, estoy intentando convencerme de eso.

Pero, la noche de ayer, fue magnífica.

Cuando las estrellas dejen de brillar (destacada de ROMANCE JUVENIL 2023) [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora