Define odiar

Capítulo 7

Así que eso es una cosa.

No es nada, pero al mismo tiempo algo.

Y ese algo se terminaría pronto, si, pronto.

Bueno, no se puede pensar en eso cuando estaba a punto de tener el orgasmo de su vida o así lo cree, ya que cada que a Louis se le antoja que es momento de tener sexo mientras Harry intenta hacer la maqueta puede considerar que cada uno es mejor que el otro. Jamás admitirá eso a Louis, no necesita más ego.

—Lou —lloriquea tomando las sábanas entre sus puños con.

Harry está apoyado sobre sus rodillas con su pecho contra el colchón, Louis toma su cadera mientras arremete con desespero en busca de su liberación.

—Eres tan bueno —gime ronco y separa los glúteos tomándolos entre sus dedos— ¿Lo sientes?, ¿lo sientes tan duro dentro de ti, pequeña mierda descarada?

—Mhm, si, si, tan duro —tararea sintiendo el exquisito choque eléctrico cada que su punto sensible es golpeado.

—Deja que todos te escuchen, amor —susurra dando un fuerte azote en uno de los glúteos provocando un fuerte gemido en Harry.

—Louis —gime ante el cosquilleo familiar de su orgasmo. El castaño toma sus rizos y tira de ellos echando la cabeza hacia atrás— v-voy..., Dios, voy a correrme.

—Hazlo, córrete, Harry —siente como el interior se aprieta alrededor de su miembro, embiste desesperadamente gruñendo y tomando con fuerza los glúteos volviéndolos rojizos y marcando sus dedos en la piel. Sabe que Harry se corrió cuando siente que pierde fuerza en las piernas— Me aprietas tan bien, Harry —gime y lo escucha lloriquear, eso le basta para presionarse contra la entrada y correrse— Mierda.

Luego de recuperar aire sale de él, se quita el preservativo, lo ata y luego lo tira en la papelera. Es el cuarto en la semana.

Harry gruñe en un quejido cuando Louis lo ayuda a darse la vuelta para quedar con su espalda contra el colchón. Louis se inclina sobre su cuerpo e intenta besarlo, pero Harry hace su cabeza a un lado, frunce el ceño y toma su mandíbula.

—Bésame.

—No, aún estoy molesto —niega con un puchero asomándose por sus labios.

—Acabo de follarte, bésame —gruñe.

Harry vuelve a negar. El problema es que la maqueta ya está terminada y el rizado había intentado ponerle la brillantina, pero Louis tan solo para molestarlo lo detuvo y le dijo que no quería brillantina a su maqueta. Terminaron en sexo como en cada discusión que tienen.

—No quiero —El castaño rueda los ojos y suspira.

—Puedes ponerle tu estúpida brillantina gay a nuestra maqueta —accede.

—Le iba a poner de todas formas —se alza de hombros indiferente.

—Bésame.

Harry bufa, se inclina uniendo sus labios suavemente y envuelve con sus brazos el cuello. Okey, Louis ahora tiene una cosa con besarlo luego del sexo, Harry ya no puede evitarlo y después de todo sigue sin ser sentimental.

Lo besa, suave y lento como una caricia que sus manos no dan directamente. Eso está bien, se siente bien y puede con eso.

Luego de un momento como ya se ha vuelto costumbre Louis se levanta, va al baño, trae papel para el rizado quien se limpia y se visten con sus jeans y camisa.

Louis termina de hacerlo primero, toma una almohada para dejarla descuidadamente sobre la silla de Harry, y se sienta en la otra, escribe algo en la carpeta antes de cerrarla. Harry toma asiento con cuidado en la silla y agarra los tubitos de brillantina y decorar con ilusión.