Define odiar

Capítulo 18

Harry toma aire nervioso, termina de acomodar los platos sobre la mesa mientras Anne trae una jarra con jugo de naranja y la pone sobre esta. Ve la cara de preocupación de su hijo y sonríe cálidamente.

—Tienes que intentar calmarte, cariño —se acerca y quita un rizo del rostro— Le caerás bien —asegura— Además, si Louis habla maravillas de ti hasta conmigo que soy tu madre y sé cuán maravilloso eres, ¿cómo crees que hablará a su propia hermana de ti?, hasta ella se habrá enamorado de ti —ríe y le saca una sonrisa a Harry.

—Ya, eso es exagerar, pero me preocupa darle una buena primera impresión al menos. Sus hermanas son muy importantes para él...

—Y tú también —lo interrumpe— Tu también eres importante para él, y ella más que lo debe de saber, estoy cien por ciento segura que vendrá decidida a que le caerás muy bien.

—Pero, ¿y si no?

—Oh, vamos, ¿dónde quedó mi niño seguro de sí mismo?, ¿no que eres el más genial de todos?

—Claro que lo soy, pero puede que ella no vea mi genialidad —dice en tono obvio.

—Verás que lo hará, es difícil de ignorar algo como eso —sonríe ampliamente y se aleja para dirigirse a la cocina.

Harry vuelve a quedarse solo en el comedor, escucha a su madre hablar con Robin sobre la comida y sus pensamientos inquietantes lo vuelven a atormentar. Su celular vibra en el bolsillo de su pantalón.

Gatito imbécil: Te amará

Harry vuelve a sonreír, a veces se le hace curiosa la capacidad que tiene Louis de adivinar sus pensamientos, aunque ni siquiera estuviese viéndolo, y amaba que así fuese. Le hacía dar saltos de amor a su corazón cada que demostraba con ello cuán pendiente está de todo como para conocer todo de él, incluso sus pensamientos.

De pronto la puerta de entrada es abierta suavemente, Harry se dirige a ella y ve a Louis entrando con sus hermanas detrás suyo, traga saliva. Sonríe nervioso mientras Louis se acerca para saludarlo con un sonoro y corto beso sobre sus labios.

—Bueno... —Louis es interrumpido por Charlotte quien se acerca a Harry rápidamente y lo abraza por la cintura con fuerza— Ehh, casi me empujas.

—Tú ves a Harry todos los días por horas —se excusa la chica mientras su abrazo es correspondido.

—¿Y?, ¿desde cuándo tán unidos? —bromea alzando una ceja.

—Desde el momento en el que saqué una buena nota en mates gracias a su ayuda y desde que gracias a que te ama tengo la habitación para mi solita.

—Yo te lo expliqué —Louis se cruza de brazos ofendido.

—Pero Harry tuvo que explicártelo a ti primero.

Los tres ríen. Hace un mes que han conseguido mudarse a un pequeño apartamento de una habitación y ambos hermanos deben compartir habitación, aunque la mayoría del tiempo Louis pasa las noches con Harry y luego vuelve para levantar a Charlotte, hacer el desayuno y todo lo necesario.

Harry dirige su mirada hacia Félicité quien solo se limita a verlo atentamente cosa que lo pone más nervioso aún. ¿Por qué lo ve de esa forma?, se siente juzgado de alguna forma. Louis lo nota y carraspea.

—Bueno, Lottie, deja que Fizzy salude a Harry o algo, ¿no?

Charlotte se aparta y Harry da unos pasos hacia la hermana mayor, extiende una mano y sonríe.

—Un gusto.

—Igualmente, Harry, Louis me ha hablado mucho de ti —dice la chica en tono neutral, sigue viéndolo con atención, sin sonreír.