¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
<─────•✰•─────>
❝ ¡Ya soy estudiante de ÉXTASIS!...❞
·━━━━━━✧♛✧━━━━━━·
— Lyri — habló Victtoria intentando despertarla, la castaña no despertó.
— Cinco minutos más — murmuró Emma somnolienta sin intenciones de abrir los ojos.
— Despiertate, pareces el cachorro de un perezoso — murmuró Sirius.
— No molestes, Black.
— ¡Aguamenti! — la varita de Sirius expulsó un chorro de agua, directo al rostro de su hija.
— ¡Maldito perro...! — se levantó rápidamente.
Emma se estrujo el cabello mojado mirando a su padre con el ceño fruncido.
— Debes bajar a desayunar — dijo pelinegro mientras se reía.
— ¡¿Y no podías simplemente seguir moviéndome?!
— Nah, eso hacen los padres normales, nosotros somos magos, amor — Sirius se encogió de hombros.
— Después iremos de compras — dijo Victtoria, quien levantó su varita y seco el cabello de su hija con el conjuro de aire caliente.
— ¡Es tempranisimo! — dijo la ojiverde refunfuñando cuando vio la hora.
— ¡Son las nueve! — negó Sirius.
— ¡Me despierto a las 12, deberías saberlo! — se quejó Emma levantandose de la cama.
Su padre salió para que pudiera cambiarse, dejandolas solas a ella y a su madre.
Sirius por fin es un hombre libre, fue absuelto de todos sus cargos, y ahora Pettigrew es quien esta dentro de los magos más buscados.
— Déjame arreglar tu cabello — dijo Victtoria cuando Emma se sentó frente al espejo, tomó un cepillo que había en el mueble.
La mujer comenzó a pasar el cepillo por el largo cabello castaño de su hija, mientras está la veía con una sonrisa a traves del espejo que estaba frente a ellas.