Capítulo trece.

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Levantarse todos los días a las cinco de la mañana para prepararte para trabajar y luego ir a la universidad pasando hambre todo el día porque ni siquiera te daba tiempo a comer algo era horrible, pero esa era la rutina de Yeonjun.

Los únicos momentos dónde se alejaba de esa tortuosa rutina era los fines de semana cuándo iba a fiestas o a veces solo se juntaba con sus amigos a tomar un poco, en algunas ocasiones también estaba Soobin y los amigos de él.

Con Soobin nunca hubo dificultad con el tiempo (por su parte), cuándo tenían horas libres en la universidad se la pasaban juntos o a veces se salteaban clases para hacerse compañía, sin embargo siempre hubo un problema desde la perspectiva de Soobin, parecía como si él quisiera consumir todo su tiempo libre, cada vez que quería disfrutar un poco con sus amigos Soobin tenía que ir porque si no se enfadaria y eso terminaría en una pelea.

Yeonjun empezó a cansarse en un punto así que comenzó a ponerle límites, esa era una de las razones por la cuál peleaban mucho en las últimas semanas de su relación, Soobin juraba que Yeonjun lo estaba engañando con alguno de sus amigos y que por ello quería alejarlo.

Yeonjun estaba frustrado, pero quería mucho a Soobin, era su novio después de todo.

Cuándo se enteró que en realidad era Soobin quién lo engañaba con Beomgyu algo se rompió dentro de Yeonjun, había estado soportando meses de reclamos por cosas que él no hacía cuando en realidad Soobin era quién las estaba haciendo. Fue injusto.

Quizá era esa molestia la que lo impulsó a querer demostrarle a Soobin que no le dolía y que él podía hacer lo mismo.

Beomgyu era lindo aunque Yeonjun no entendía como pudo congeniar bien con Soobin, eran tan diferentes. Con el tiempo lo comprendió, Beomgyu era tímido, inseguro, tenía miedo de reclamar las cosas que no le gustaban, tenía miedo de expresar lo que le gustaba.

Tal vez fue esa la razón por la que Soobin decidió engañarlo con Beomgyu, Beomgyu era todo lo que Yeonjun se negaba a ser. Él no quería que Soobin le diera ordenes, no era su perro, era su novio. Fácilmente Soobin pudo hacer que Beomgyu hiciera lo que él quería.

Soobin quería dominar a alguien, tener poder sobre él, que con tan solo hacerse un poco la víctima la persona accediera a todo lo que él diga, y eligió meterse con alguien que buscaba complacer a su pareja para que no se aburriera de él.

La primera semana después de la ruptura Yeonjun la pasó fatal, un engaño no era fácil de superar. Su cabeza daba vueltas y le costaba enfocarse en las clases, más aún en los exámenes, estaba jodido. Fue de gran ayuda su amigo Wooyoung, él intentó siempre subirle los ánimos, a veces le hablaba de cualquier cosa para que se distrajera un poco, Yeonjun se lo agradeció de corazón pero eso no fue suficiente.

Necesitaba sacarse el dolor del sistema de alguna manera, y su cabeza solo pensaba en algo, en alguien. Beomgyu era la única persona que entendía por lo que estaba pasando porque ambos habían terminado una relación con la misma persona. Recordaba sus ojitos llorosos diciéndole que se sentía tonto y patético y le dolía un poco, lucía tan inocente que le generaba enfado lo que hizo Soobin.

Luchó por no dormirse esa noche, porque la verdad es que durante toda la semana había tenido la idea de ir a visitarlo pero el sueño lo consumia de manera terrible, finalmente ese fin de semana pudo ir a visitarlo.

La compañía de Beomgyu calmó su corazón dolido, él chico era cómo un calmante, supo que no mintió en ningún momento cuando le dijo que quería conocerlo, él era agradable

No conocía hace mucho a Beomgyu pero había logrado ver muchas facetas de él en ese corto tiempo y ninguna de ellas le desagradaba. No le importaba lo sensible e inseguro que parecía ser, Yeonjun quería reparar su corazón.

Cuándo Beomgyu se apareció con comida en su universidad Yeonjun sintió que ya estaba completamente perdido, nada iba a poder hacer que se alejará de ese chico, quería quedarse con él durante mucho tiempo.

Beomgyu se había preocupado por él, tuvo en consideración que Yeonjun nunca tenía el tiempo suficiente para comer y aunque podía parecer un detalle mínimo o insignificante para Yeonjun no lo fue.

Su rutina que consistía en levantarse temprano, ir a la universidad y pasar hambre todo el día había cambiado, no era tan diferente pero el pequeño cambio alegraba mucho al pelirosa.

Ya ni siquiera le hacía enfadarse de sobremanera que Soobin lo fuera a molestar en sus horarios libres con palabras estúpidas y discursos de porque debería de volver con él y lo pronto que se aburriría del pequeño azabache. Porque sí, Soobin había estado insistiendo y molestandolo de manera constante aún cuando era consciente de que Yeonjun sabía que él hace medianamente poco intentó buscar a Beomgyu.

Pero ya no le importaba, ni le ponía de un humor insoportable, porqué cierto chico lindo aparecía con una bolsa colgando entre sus manos y un adorable sonrojo en sus mejillas, solo eso hacía falta para que Yeonjun se ponga feliz y cualquier malhumor que tenga desaparezca.

Se despidió de Wooyoung aún cuando éste por poco le rogó que se quedará con él, Yeonjun no quería así que se negó amablemente. Caminó un poco apresurado por los pasillos porque ya había recibido un mensaje de Beomgyu que decía que ya estaba en la universidad.

Una sonrisa inconscientemente apareció en su rostro cuándo lo pudo divisar a lo lejos, se notaba que no era de allí mirando para todos lados como si estuviese buscando a alguien, y Yeonjun no pudo evitar que su corazón se sintiese cálido al saber que lo estaba buscando a él.

La sonrisa desapareció cuando sus ojos captaron como una cabellera morada se acercaba a Beomgyu, él se vio tan asustado que algo en el pecho de Yeonjun pinchó del dolor, según lo que él sabía la última interacción que habían tenido no fue la mejor del mundo.

Soobin lo tomó de la muñeca e intentó llevárselo, Beomgyu forcejeo y se liberó, retrocediendo un poco para mantener distancia del chico alto. Yeonjun logró ver como la cara de Soobin se desfiguraba, mostrando enojo, el rostro del menor se vio aún más aterrado.

Yeonjun aceleró el paso llegando a ellos en unos pocos segundos, ignorando totalmente a Soobin tomó a Beomgyu de las mejillas y lo besó. Él jadeo sorprendido pero correspondió, Yeonjun sintió cómo el cuerpo del menor que estaba tenso se suavizaba entre sus brazos.

Se separó de Beomgyu, su cara estaba rojita, Yeonjun sonrío y lo tomó de la mano para ir a algún lugar más privado, era hora de comer la deliciosa comida que le había preparado su futuro novio.

...

holaa uu

esperó les haya gustado el cap, no me termina de convencer a mi pero bueno ;(

una preguntita, ¿qué es lo que más le gusta de esta historia?

nos leemos luego, chao !!

Our Boyfriend » YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora