La casa del Dragón [La Princesa Roja] ✔️

Capítulo 13

Segundo Velaryon.

Rhaella.

Laenor Velaryon estaba muerto.

Aún no podía asimilar su muerte. Laenor era mi mejor amigo, lo quería como a un hermano y ahora ya no estaba.

Lágrimas querían salir de mí pero no podían. Era como si estuviera completamente seca por dentro e incapaz de llorar.

Me encontraba viendo el agua a las orillas del mar perdida en mis pensamientos.

Hace solo unas horas me estaba riendo a carcajadas junto a él y estaba feliz porque Laenor había olvidado por algunos minutos la muerte de su hermana y éramos solo él y yo.

Y pensar que ahora nunca más escuchare su risa.

—Rhaella... —llamó Corlys.

Me volteé y al verlo fue inevitable que las lágrimas que he estado conteniendo no salieran.

Fui corriendo a abrazarlo y él me devolvió el abrazo al instante.

Ambos lo necesitábamos.

—¿Quién fue el responsable? —pregunté.

Corlys negó.

—No creó que haya sido quien aseguran que fue. Todo esto es parte de un plan, estoy seguro.

—Nombres, Corlys. Quiero nombres.

—Rhaenyra Targaryen.

Me separé de él al instante.

—Es una acusación muy grave.

—Rhaella, piénsalo. Ambos sabemos que Rhaenyra siempre ha querido estar junto a Daemon y ahora que mi hija no está, su único impedimento para estar con él era Laenor.

Rhaella se negaba a pensar en ello.

—Rhaenyra sería incapaz. Es el padre de sus hijos...

—Le han quitado autoridad, todos en el concejo dudan de su reclamo al trono. Tu hermana busca fortalecer fuerzas para que nadie más dudé de su reclamo —masculló Corlys, intentando convencerme y tiene razón.

Aún así no quería creer en lo que estaba diciendo.

—Hablaré con ella antes de suponer e equivocarme al respecto —aclaré.

—Es decisión tuya, Rhaella. Quiero asegurarme que vengarás la memoria de Laenor y acabarás con todos los que fueron partes de ese retorcido plan mientras no esté...

—¿Te irás? —indague.

—Necesito tomarme un descanso de todo y todos. La muerte de Laena aún me afecta bastante y ahora Laenor. Solo quiero navegar hasta encontrar el final del océano.

Era su decisión aún cuando no estaba de acuerdo con que dejara a su esposa y nietos cuando más lo necesitaban.

—Supongo que no nos veremos en un largo tiempo, Lord Corlys.

—Fue divertido haber compartido junto a ti, princesa roja. Creo que es momento de una despedida.

Ladeé la cabeza.

—Será un hasta pronto, no un adiós. No permitas que la marea te lleve con ella y regresa a tu hogar con tu familia —pedí.

Lord Corlys me dio una sonrisa antes de abrazarme.

—Cuídate mucho, mi princesa.

—Lo haré —aseguré.

Me dio una última miraba sonriendo antes de comenzar a irse. Ver su silueta desaparecer en la orilla del mar me conmovió y tuve el presentimiento de que sería la última vez que lo vería.