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Faltaba un día para la vuelta de Manolo, tenían ganas de verlo para contarle como iba la cosa respecto la huida, estaban más animados que de costumbre, ninguno habló sobre lo sucedido hacía un par de noches, tampoco quisieron pensar mucho en ello, solo sabían que les había sentado mejor de lo que esperaban.

- Mañana empezaremos con el ejercicio, ya has descansado muchos días - Greco observó al rubio tumbado al lado suya.

- Pff, pero el pobre querrá descansar, no le vas a dar ni un día - miró preocupado al moreno

- Anda Gustabo que no cuela, te importa bastante poco eso, solo quieres librarte tú - el nombrado se encogió de hombros - eres un vago.

- Y tú demasiado no-vago - frunció el ceño y aquello hizo reír al mayor.

- ¿No-vago? - preguntó sonriendo, a lo que recibió un asentimiento como respuesta - deja de poner esa cara que pareces un bebé - le pasó la mano por la cara intentando borrar la expresión del otro.

- ¡No me hagas eso que me da coraje! - relajó la expresión de su cara y rió junto al otro.

- ¿Ah sí? Lo tendré en cuenta para hacerlo más a menudo - vaciló al contrario que le dedicó una mirada de pocos amigos.

- Que gracioso eres - bufó cruzando sus brazos y volteó la mirada hacia arriba.

Greco estuvo observándolo por unos segundos hasta que habló de nuevo.

- Oye, ¿tú tienes pareja? Me refiero a que si tienes a alguien fuera esperándote, no aquí, claro.

- No, yo no sirvo para esas cosas, soy libre y me gusta serlo en todos los ámbitos, no cambiaría eso - clavó la mirada en el moreno - por nadie.

El mayor negó con la cabeza.

- Cuando encuentras a la persona correcta no te sientes atado, te quedas porque estás bien ahí, es una decisión y el hecho de que puedas tomarla y elegir por ti mismo si quieres quedarte o no, confirma que en las relaciones también existe esa libertad que tanto quieres.

- ¿Tú si tienes a alguien? Hablas como si lo tuvieras - sabía lo que esperaba escuchar como respuesta, mejor dicho, sabía lo que quería escuchar como respuesta.

- Porque sé de lo que hablo, pero no tengo a nadie actualmente.

- Pero tuviste a alguien que te hizo sentir así - no era una pregunta, sabía que así era, podía verlo en la expresión de su cara, simplemente, lo sabía.

- Sí.

Eso no le gustó al rubio, no quería pensar en Greco saliendo con alguien y sintiendo lo que había explicado anteriormente, era egoísta y lo sabía, pues él mismo había dicho que no quería nada serio, y eso era verdad, pero tampoco quería que el otro lo tuviera. Se había acostumbrado a pasar las horas con él y tenía miedo de perderlo porque llegara alguien que mereciera más la pena y teniendo en cuenta el historial que tenía en la vida del contrario, esa misión no era difícil, sí, eso era lo que ocurría, no quería perder la amistad que estaban construyendo o eso se dijo a sí mismo antes de cambiar de tema radicalmente al darse cuenta que si seguían por ahí terminaría diciendo algo de lo que se arrepentiría. - Y bueno, ¿me vas a contar de una vez por todas como es que te comes una perpetua por un robo?

Ese cambio tan repentino de conversación le sorprendió al moreno, pero decidió no decir nada al respecto.

- No me pillaron, me tenía que dejar pillar - al oír eso el rubio lo miró sorprendido y se giró hacia él.

- Pero tú me dijiste que...

- Sé lo que dije, es lo que debía decir - el menor lo miró prestándole atención - se suponía que serían unos 20 años y así saldaría la deuda de mis padres y soltarían a mi hermana, pero en cuanto me condenaron a perpetua supe que me la habían jugado, que ni mi hermana saldría viva de allí, ni yo de la cárcel, por eso me uní al plan de huida, ya no me quedaba nada - cuando terminó de hablar se sintió liberado, llevaba mucho tiempo callando eso y poder conversar del tema con alguien y desahogarse le venía bien.

La Cárcel - Grecabo (SpainRP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora