Rei esperaba afuera de la casa, estaba aterrada y ciertamente tenía razones para estarlo. Su esposo había quemado su propia casa peleando con una chica entrometida.
Intentando salir lo más dignamente posible del porche, con Shoto en brazos, ignorando que la pelea me había dejado agotada mental y físicamente, aclaré mi garganta y la miré con determinación.
Ella buscaba el teléfono con torpeza en sus bolsillos, aún sin saber si debía llamar a la policía, a los bomberos o a los agentes federales.
—¡¿Qué ha pasado?! —dijo por fin, casi sin aliento.
—Nada que temer…—dije, con una sonrisa agridulce y una voz agitada. La sirvienta me quitó a Shoto de los brazos y retrocedió un poco.
—¡¿Qué pasó allá adentro?! —exclamó una vez más, impaciente de mi lentitud al hablar.
—Tu esposo demostró ser un hombre razonable en el interior y llegamos a un acuerdo civilizado. —Apenas terminé de decir aquello la habitación de invitados explotó con el incendio dejando a Rei boquiabierta—. Bueno, tal vez hubo tropiezos en la conversación pero todo está aclarado.
—Quemaron mi casa…
—Solo dos habitaciones, Endeavor se puso como loco…además ya no la necesitas. Que él se las apañe con las reparaciones —dije, intentando calmar los ánimos, ignorando el hecho de que fui yo quien le arrojó un tambor de gas licuado encima a Enji— En cuanto a ti, debes salir de aquí. Quédate en mi casa con tus hijos mientras encontramos un lugar seguro para ustedes…
—Yo…Enji es mi esposo, mi deber es estar a su lado —respondió como una autómata.
—Rei, por favor —dije, ya soltando unas lágrimas—. Entiendo que después de todos estos años sientas lealtad por tu esposo. Pero si quieres hacer algo por él, debes dejarlo enfrentar sus malas decisiones. Tienes que pensar en tus hijos y en ti, ¡Enji está roto en este momento!, y mientras no se componga será un peligro para ustedes. Te lo suplico…
—¿Por qué haces esto? No es responsabilidad tuya. —No sonó como un reproche, sino como una pregunta sincera.
—No me interesa sí soy la mala y la entrometida del cuento. No puedo callar lo que sé y no hacer nada.
—No podría ver a mis padres si los deshonro de esta forma. Debo quedarme —dijo, apretando los puños contra su pecho.
—¿Tus padres? Ellos no entienden por lo que tú…
—No, T/N. Tú eres la que no entiende. Eres demasiado jóven para entender.
—Sé que soy jóven. Pero no lo veo como una desventaja. No me menosprecies por ser jóven, porque serlo no me hace estúpida. Veo que tu situación solo los llevará a una tragedia. ¿Quieres esperar a que eso suceda? ¿Tal vez el día en que Enji haga un daño irreparable…o el día en que te lleve a la locura y seas tú la que dañe a tus hijos?
—¡No debes decir eso! ¡Nunca! —dijo, sollozando y temblando— ¡Nunca! ¡Vivo por ellos, muero por ellos! Todos los días…cada hora…respiro…
—¡Sabes que la presión que te ha puesto en los hombros te llevará a un pozo del que no podrás salir! ¡Simplemente es demasiado! Si con dificultad tú siendo adulta puedes lidiar con esto…¿Qué pasará con tus hijos? Touya está al borde del colapso y no sé en qué situación están los demás.
—¡No iré!
—Bien, eres una mujer adulta. Debo respetar tu voluntad. Pero a los niños no los dejaré contigo…
Ella me miró con los ojos acuosos.
—¿Te los vas a llevar? Yo soy su madre.
—Lo sé. Y no haré un mejor trabajo que tú…pero debo alejarlos de esta zona de guerra en la que los han metido. Y si no es por las buenas, será por las malas. Ya hablé con Enji, y si interfiere lo voy a exponer de una manera en la que su reputación no se recuperará. No tiene más remedio que dejarlos en paz…¡Eres mi amiga! No quiero que nadie te hiera otra vez!
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Madre no hay una sola (BNHA)
Fanfic¿Quieres ayudar a los niños traumados de boku no hero? ¿quieres quitarles la patria potestad a sus negligentes padres? ¿estás leyendo esto con voz de comerciante? ¡Entonces este libro es para ti!