Cuando, dónde y como el amor quiera - Factor R

"Voy por ti"

-Quiero saber si yo...si yo – se señalo a si misma – Aunque te tenga a ti y tenga a papá puedo elegir a alguien para que sea mi otra mamá. Si...si puedo elegir a otra persona para decirle mamá. Porqué yo se que me ama mucho, mucho como me amas tu o papá y yo la amo mucho mucho a ella – finalizó Emma sin mirar a su madre. Al ver que su madre no había entendido del todo agregó - Quiero saber si puedo preguntarle a Samy si quiere ser mi otra mamá

-Tuu tuuu tuuu ¡muevete idiota! ¿O acaso no ves la luz verde? TUUU Tuuu - Pero Rocio no reaccionaba ante las protestas de los demás conductores. Todavía seguía procesando cada palabra que le había dicho Emma. Por primera vez en su vida no tenía todas las respuestas para su hija. ¿Que le iba a decir?

-Eee... Espera...Espera Emma – Rocio trataba de aparcar su coche a un costado de la calle, este tipo de preguntas deberían estar prohibidas cuando uno maneja, como usar celular o manejar borracha – Puff – Suspira. Respira hondo – A ver, Emma. Tu no puedes andar por la vida eligiendo gente para que sea tu madre – La castaña no estaba segura de las palabras que salían de su boca.

-Pero... - Emma interrumpía.

-No, espera déjame hablar. Ser madre implica muchas cosas no sólo divertirse como tu te diviertes con Rivers. Tu y ella se llevan muy bien lo entiendo, por eso son amigas – explicaba Rocio.

-Pero mami... ¿tú me quieres? – preguntó la niña.

-Si por supuesto pero...

-Rivers también me quiere... ¿tu me cuidas? – la mayor asistió – Ves, Rivers también lo hace.

-Emma cariño, se que te has encariñado mucho con ella pero no puedes pedirle eso. Algún día ella tendrá su propia familia, sus propios hijos – A Rocio se le formaba un nudo en el estomago de solo imaginarse a la rubia armar su vida con otra mujer...

-Y bueno serán mis hermanos entonces – la lógica de la niña era acertada.

-Lo siento pequeña pero no puedes preguntarle eso a Rivers, no es correcto – concluyó Rocio volviendo a arrancar el auto y mirando de reojos a su hija como se echaba contra el vidrio haciendo pucheros.

Departamento de Rocio

Apenas entraron a la casa Emma salió corriendo a su habitación como si estuviera preparándose para los 400 metros llanos de las olimpiadas. Ni siquiera se detuvo a saludar a sus tías. Entró a su pieza y pegó un portazo.

-Guaauu esa cara no debe significar nada bueno – decía Vicky que había observado todo el trayecto de la pequeña hasta su habitación - ¿Qué pasó Chio? ¿Coqueteó con alguna camarera de nuevo? Al paso que va esta niña va a tener más conquistas que Leo Di Caprio ¿Y tu por qué traes esa cara? Habla Rocio me estas preocupando – la abogada se empezaba a poner sería al ver la cara que traía su amiga.

-No van a poder creer lo que me acaba de preguntar mi hija – Dijo Rocio.

-No me digas que ya quiere saber de sexo ¡O Dios mío! Pero si apena es una bebe. Nuvia hay que buscar el libro que te regala cuando creías que los bebes venían de cigüeñas – Vicky se agarraba la cabeza. Se habían puesto una a cada lado de su amiga.

-Vicky, deja que Rocio hable – pidió amablemente Nuvia – ¿Que paso Chio?

....Luego del relato que Rocio les hizo a sus amigas acerca del "trágico" momento vivido con su hija en el coche, las otras dos se habían quedado procesando toda la información.