Las lunas demoníacas son Pilares

Capitulo 24

Nakime yacía en el suelo inconsciente tras haber luchado valientemente.

Pasaron varios minutos hasta que una imponente presencia llega al bosque presenciando varios cadáveres de cazadores quienes habían sido asesinados por Chēn anteriormente.

Siguió caminando y con ayuda de su cuervo logró encontrar al cuerpo herido e inconsciente de Nakime. Rápidamente se dirigió hacia ella revisando sus puntos vitales.

-Pobre joven, luchaste incansablemente hasta el punto de quedar inconsciente.-Expresaba entre lágrimas;el hombre fornido y musculoso de cabello negro corto con una gruesa cicatriz que corría horizontalmente a lo largo de su frente, sus ojos no poseían irises. También levaba consigo un Haori verde de mangas largas y bordes blancos el cual tenía escritos a cada lado y estampados en su espalda los sanscritos del budismo en una clara alusión a su religiosidad. Acompañado de un collar de cuentas gruesas de color rojo alrededor de su cuello.

Tras unos minutos varios kakushi llegaron al lugar, apresurandose a dar cuidado médica a la pelinegra.

-¿Hay algún otro sobreviviente?-Preguntó uno de los kakushi a su otra compañera.
-No lo sé, los otros están investigando el lugar pero al aparecer todos fueron masacrados excepto esta joven.-Respondió mientras revisaba la herida de Nakime.

-Tokito ha muerto, era tan joven-Decía el hombre de alta estatura.

-¿Ese es el pilar que llora por todo?-Murmuró uno de los kakushi, recibiendo un golpe en la cabeza por parte de la kakushi mujer.

-¡Su nombre es Gyomei Himejima, el pilar de la roca, más respeto hacia el!-Decía la muchacha con el ceño fruncido.

-Pobres chicos se odian entre sí-Decía el pilar mientras derramaba más lágrimas.

Los kakushi simplemente observaban al gran hombre en su llanto y se sentían extrañados e incómodos, era tan inusual ver a un hombre de ese porte derramando lágrimas como un niño pequeño.

De pronto el pilar quien seguía en su llanto con las manos entrelazadas se volteó notando la presencia de Tokito junto con 2 kakushi quienes cargaban al joven Gyokko.

-Sigues vivo-Decía el hombre derramando aun más lágrimas, la kakushi estaba desconcertada tenía una perspectiva diferentes de como sería un pilar.

-Si...¿y que?además...¿Por qué lloras?-Decía el joven con tono despistado y una expresión indiferente.

Mientras caminaban el pilar de la niebla observo como los kakushi se llevaban los cadáveres de los cazadores.-¿Que pasó...? La chica demonio...-El chico se detuvo observando el cielo nocturno.-Se me olvidó-Comentó en una tenue tono de voz.

Los kakushi se llevaron los cadáveres y a los 2 cazadores heridos, tras conversar lo mínimo, los 2 pilares se despidieron y se separaron.