Día 14 - Primer beso

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Advertencia de contenido: Angst, A/B/O, Omega!Katsuki, Alfa!Eijiro, embarazo no planeado, diferencia de edad(menos de 10 años), Primera parte.

Su primer beso fue tal vez lo que debió detenerlo, no dejarse llevar por lo bien que su corazón se sentía. Se habían conocido en el gimnasio cerca de su universidad, debió cambiarse después de su penosa primera charla y no después de un par de salidas, tenerlo en su dormitorio como si de una verdadera pareja se tratase. Nunca hubo una mordida, un vínculo, perfumarse mutuamente, todo fue carnal. O eso quería convencerse, ignorando los recuerdos de las caricias tranquilas en el sofá y los ronroneos.

No aceptaba que le entregó todo: su corazón, sus caderas, su cuerpo, su amor y él se atrevió a irse.

Eijiro Kirishima, el alfa que nunca supo cómo amar, al que le dio demasiado pero no suficiente. Un alfa sin una educación real, se mantenía de trabajos de medio tiempo, era mayor que él tanto en edad como en inmadurez y aún así había atravesado sus barreras, invadió todo su ser, pero terminó dejando un desastre dentro.

Su hijo nació meses antes de terminar, parecía ser la respuesta para hacerlo permanecer a su lado, que serían una familia, tendrían un vínculo, pero simplemente una noche lo fue a dejar a su apartamento, Katsuki con el bebé dormido en sus brazos, Eijiro sólo se quedó en la entrada y con su sonrisa llena de tristeza dijo:

-Esto no está funcionando... No te dejaré solo con el bebé, pero no puedo esposarte... Lamento no ser el alfa que mereces, que necesitas, te quiero mucho, a ambos, por eso sé que es mejor estar separados. Pero, ey, fue un buen amor mientras duró ¿No?

Ahora se despertaba por los recuerdos, tratando de encontrar una parte de él que no tocó, que no tomó. Su amor, su confianza, todo iba muriendo por las picaduras de corte por sus planes delgados como el papel. Se rindió con él como si fuera una mala droga, no podía fingir que estaba bien cuando no lo está, ni él, ni Eijiro, ni toda la maldita situación. Nada estaba bien.

¿Cómo podía arrullar a un bebé que se parecía tanto a él? ¿Cómo podía hacerse el fuerte cuando lo veía? Esto no era justo, no era justo para nadie, ¿Por qué se lo estaba permitiendo?

No podía (ni quería) olvidarlo todo, por algo tomaba sus labios recordando ese primer beso que lo arruinó todo, que lo hizo creer que él era el indicado, porque aún sentía los de él, aún estaba cálido. No podía deshacerse de ese candelabro que todavía estaba parpadeando. No quería apagar las luces, aún no.

Tomar el camino largo a casa, no ayudaba a despejar su mente; porque las luces del semáforo sintiendo pena por él, no ayudaba a saber si estaría bien; porque ver por el retrovisor a su bebé durmiendo en su asiento, no le daba toda la paz que necesitaba. Su única solución para respirar de nuevo, fue contestar esa llamada.

Continuará en día 20.

Canción de inspiración: Death by a thousand cuts.

Mes Kiribaku 2023 (Taylor's Version)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora