Capítulo 7

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Domi Russo

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Domi Russo

Deja de sostener mi brazo cuando mi hermano Daemon se me acerca, se despide de un beso en la mejilla, sus labios me erizan la piel tan permanente.

-¿Que se supone que haces ahora? - se altera como nunca, me sujeta el brazo

-Kokonoi Hajime es divertido, a pesar de tener un aura de que solo le emociona el dinero, es maravilloso - junto mis manos

-Lárgate de aquí - me suelta el brazo con fuerza

-¿Me vas a echar de tu fiesta solo porque me acerque a ese mafioso? - Que imbesil

-Solo me causas estrés, voy a llamar al chofer de mi auto, entras en la casa y no sales - se va dejándome con la palabra en la boca

Maldigo su nombre a lo bajo, hace mucho frio, me quedo como estúpida esperando al fin llega el auto rojo, me quito los zapatos altos, el auto se pone en marcha.

-Me las vas a pagar maldito Daemon - mi mal genio se empeora cuando miro el tráfico

Últimamente estoy muy malhumorada y estresada, quizá porque no quiero ver a esa persona

No sé si lo besaría o lo golpearía.

Me acomodo en el sillón y cierro los ojos, tengo algo de sueño, no siento en qué momento me quedo profundamente dormida, desde que tengo asma mi sueño es el más pesado del mundo algo malo o bueno, no tengo la idea completa de lo que sea mejor.

Estiro las manos, me siento débil a la hora que despierto al mirar a mi alrededor aun sigo en el auto, opto por bajar de este, estoy frente al hotel, mi teléfono empieza a sonar, vuelvo al auto a buscarlo pero no esta, sigo el sonido hasta darle vuelta al mismo eje del susodicho

-¿Buscas esto? - miro a la persona que está frente a mí

El hombre es alto, va vestido de negro completamente y deja caer el gorro que le cubre el cabello morado con rayones negros, sus ojos conectan con los mios de una manera tan fuerte como ninguna otra.

Aqui vuelve el desastre que siempre nos lleva a la destrucción completa del mundo, me sonrie, ¿No es el tipo que estaba tratando de sacarme conversacion en el casino?

-¿Ahora los choferes roban las pertenecias de sus clientes? - tiene mi telefono en la mano

-Eso lo hacemos desde muchos años atras, aunque este humilde chofer no solo quisisera robarle el telefono...

-¿No? ¿Que es lo que mas me robaras? el dinero, la cartera o los zapatos - me sonrie acercandose

-El corazón - mucho más cerca se ve mejor

El rostro blanco y delicado, alza el telefono, cuando estoy por agarrarlo sus ojos se reflejan mejor y ese violeta asqueroso se revela.

-Ran - los pensamientos se me escapan

Se muerde el labio inferior de una manera tan lasciva que me provoca pegarle

Cuando era su novia tenia una manera elocuete de reconocer incluso lo más escondido de él, pero lo más resaltable eran sus ojos, aquellos que me veneran con tanta adoración, es tan facil de reconocerlo, lo tuve tan cerca un día en el cual cualquier gesto se quedaba grabado en mi memoria.

Aunque pasarán los años aun sigue siendo igual, aquella mirada violeta que me eriza la piel como solo el sabe hacerlo cuando me mira, su manera tan fresca, segura y prepotente lo hace tan facil de descifrar, se ve mejor que antes, mucho más atractivo, mucho más apetecible.

-Domi Russo, Que placer verte - empuño la mano cuando se sigue acercando

¿Como se supone que reaccione? ¿Me quedo callada, continuo con la conversacion o lo mato? no tengo ni la menor idea de lo que debo de hacer, esta delante de mi, esta tan cerca pero al mismo tiempo lejos.

Mi corazón se siente calido, alegre porque esto es lo que deseaba, verlo, sentir que aun tengo aquel poder sobre él que me hace mucho más peligrosa.

-Sigues siendo la maravilla que mis ojos siempre aman idolatrar - se acerca más y más

No puedo hablar, la lengua se me seca, la voz se escapa y mis ojos no dejan de perderse en el irresistible laberinto que nos causa curiosidad por seguir descubriendo.

-Te extra... - no dejo que termine, no sé cómo terminó haciendo lo que no planeaba

Solo reacciono cuando tengo el preciso momento en donde mi puño va directo en su hermoso rostro volteando su cabeza, No quiero verlo más.

Le quito mi telefono y hago acopio de mi poca fuerza para salir de donde estoy, entro al hotel buscando las llaves en mi cartera y no las encuentro, me duele la cabeza, las manos me tiemblan y me duele verlo.

-Domi - estaria mejor a verlo golpeado más

No tengo ni idea porque siento que todo se me esta envolviendo en temor, siento sus pasos, no me importan, llego a la puerta de mi apartamento, encuentro las malditas llaves y abro la puerta, estoy por cerrarla cuando me empuja para pasar.

La mente se me nubla de odio, ver a tu victimario frente a frente es un calvario, no puedo con esto, no me siento bien y el maldito esta en mi espacio.

- Dejame hablar contigo, necesito hablar contigo - me suelto de su agarre y dejo de pensar en tanto.

-¿Que mierda haces aquí Ran? Lárgate de mi vida - lo empujo cuando me impide el paso a la puerta

- Carajo escuchame - le golpeo la entrepierna con mi rodilla

Me suelta y lo agarro del cabello sedoso y cuidado, camina con dolor a la puerta y lo saco como puedo.

-Muerete - es lo unico que le digo al cerrar la puerta.

Caigo al suelo sujetandome el cabello al escuchar como golpea la puerta, no, no estoy completamente segura que quiera verle, Dios hice de todo para parecer que era sumamente fuerte pero me doy cuenta que sigo siendo aquella niña inmadura que no maneja la vida a su favor.

aquella que sigue completamente enamorada de aquella persona que juro amarla hasta la muerte, todo parece un caos y las lagrimas se me escapan, porque tenia que venir a mi ahora, porque mejor no me quede con mi vida en Estados Unidos o porque sigo sintiendo mariposas en el estomago cuando lo miro directmaente a los ojos.

-Te odio tanto - mi llanto se hace más audible y ya no siento su esfuerzo por verme.

¿Como pude a verme venido con él en todo el camino? esto me pasa por ser tan distraidad, empiezo con los ataques de aire, gateando busco el inhalador que encuentro, tengo como diez en diferentes lados por si me pasa lo de siempre cuando me altero.

Lo inhalo tres veces seguidas hasta que siento que estoy mejor, me levanto a la cama, me acuesto cubriendome, no debo dejar que mis emociones me controlen, no puedo.

2) Irresistible Tentación | Ran Haitani (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora