Una noche (Itanaru)

Capítulo 6

Itachi veía el techo de su habitación con seriedad, desde aquella noche no había podido sacar al rubio de su cabeza, había desaparecido por completo, lo estuvo buscando y nunca coincidieron en una nueva noche, se movió entre bares descubriendo que trabaja en otros dos o tres bares, ayer todo se había terminado, el cadenero le dijo que había renunciado, lo mismo en los otros lugares, estaba tan tomado aquella noche que no recordaba cómo se sentía su chakra, quiso investigar más y nadie sabía dónde vivía o dónde encontrarlo, talló su rostro con frustración, le encantaba, le fascinó completamente, era tan sensual y juguetón, se sintió bastante cómodo a su lado, nunca le había sucedido congeniar de esa forma con alguien, menos si era un desconocido; lamió sus labios al recordar su hermoso cuerpo, su hermoso rostro, sus piernas, sus pequeños pies, su sonrisa, sus gemidos, sus labios y esos deliciosos besos, esas gemas que lo volvían loco y su delicioso aroma a vainilla, tapó su rostro con su brazo cubriendo el marcado sonrojó que seguramente tenía en sus mejillas, negó con fastidio, tenía que encontrarlo.

…..

-Cachorro -el pequeño vomitaba, le había pasado algunas veces los últimos meses, suponía era porque Kurama estaba dormido, nunca había enfermado y lo relacionó con la ausencia del zorro -¿qué sucede? -una vez más vomitaba, se aferró al retrete, respiraba con dificultad después de la serie de arcadas que lo habían atrapado -tienes problemas y bastante grandes -el rubio levantó ligeramente su mirada -¿de qué demonios hablas? -el zorro guardó silencio un momento -no entiendo bien, antes de la guerra no tenías eso en tu cuerpo, cuando desperté no presté atención, pero ahora que te veo así, analicé un poco tu cuerpo, creo que el chakra de mi padre alteró un poco tu anatomía -el rubio negó sin entender -¿de qué hablas?, no entiendo -el zorro guardó silencio -sé que eres hombre y por eso no usaste protección con el Uchiha-

Naruto volvió a vomitar, el zorro espero un momento -tu cuerpo formó una matriz, estás embarazado -el rubio vómito aún más al escucharlo, no podía parar, minutos después logró tranquilizar su cuerpo -no… digas … tonterías -el zorro bufó -cachorro, nunca bromearía con algo así, es bastante serio lo que te estoy diciendo -el rubio abrió sus gemas bastante, bajó su mirada en shock, no entendía, no era muy inteligente -tendrás un bebé en pocos meses cachorro, lo lamento -Naruto levantó un puchero, se recargó en la pared no sabiendo qué pensar o sentir, apenas podía mantenerse, le había quedado un poco de los ahorros de su vida -habla con el Uchiha cachorro, también tiene responsabilidad y derecho -el Uzumaki apretó el ceño -¿por qué tendría responsabilidad?, soy hombre, él no sabía que podía pasar esto, yo tampoco sabía -Kurama lo vió con molestia -no digas estupideces, sabes que necesitas su apoyo, ve y habla con él, pero primero ve con tu amiga, ella sabrá cómo ayudarte, no creo que la hokage borracha se pare por aquí en bastante tiempo-

Naruto negó con un puchero, comenzó a llorar, ¿cómo se haría cargo de un bebé si apenas podía con su vida?, ahora entendía porqué no lo ascendían, comenzó a temblar con miedo, no era una persona madura, tenía miedo, ¿su sueño de ser hokage? -¿te vas a rendir? -el rubio abrió sus gemas bastante, apretó el ceño, el zorro sonrió -Naruto Uzumaki no conoce esa maldita palabra ttebayo -limpió sus azules tratando de ser valiente.

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-Sakura-chan, ¿podemos hablar? -la pelirosa levantó una ceja -estoy un poco ocupada, ¿de qué se trata? -el rubio apretó el ceño, rascó su nuca, no le gustaba pedir ayuda a menos claro que fuera para entrenar, suspiró con miedo, la Haruno lo vió con duda, se acercó a su amigo al verlo nervioso, el rubio mordió su mejilla con vergüenza -bue… bueno… -la chica levantó una ceja, era difícil verlo de esa forma, abrió sus ojos con sorpresa -no me digas, ¿por fin sales con Hinata? -Naruto levantó el rostro con duda -¿de qué hablas?, ¿por qué tendría que salir con ella?, esto es sobre mi cuerpo -la chica lo vió con duda sintiendo que había cometido un error al delatar a su amiga, se calmó al ver que la ignoró -mmmmm -el rubio giró su rostro evitando que viera su sonrojo -pue… puedes usar tu lucecita verde sobre mi abdomen un momento, Kurama me dijo algo bastante complicado -mordió sus labios con vergüenza, la chica lo vió con duda, levantó su mano, el ninjutsu verde apareció, colocó esta sobre su cuerpo, sus ojos se abrieron bastante -oh por kami, demonios, vamos a mi consultorio, Remi, cancela mis citas ahora mismo -la enfermera asintió, ambos avanzaron hacia el consultorio.

La médico ninja no perdió tiempo, lo acostó en la camilla, sacó el equipo de ultrasonido, colocó gel, levantó su playera y colocó el aparato sobre su abdomen, sus ojos se abrieron bastante -¿cómo?, no entiendo, desde hace unos meses ví tus rasgos faciales más finos, pero nunca creí que esto pudiera suceder -Naruto mordió sus labios -Kurama piensa que el chakra de Rikudou-sennin lo hizo -tapó su rostro con vergüenza dejando libre una gema para ver qué había un pequeño cuerpecito ya formado en la pantalla, sonrió quedito, su bebé -me queda claro que eres gay, ¿puedo saber el nombre de tu pareja?, deberías hablar con él -Naruto tragó pesado, negó lentamente -no hay pareja, fue sólo una noche, no sabía -sus gemas se hicieron aguadas -no sabía que esto podía pasar-

Sakura lo abrazó con fuerza -¿hablarás con él? -el rubio mordió sus labios -no lo sé -la Haruno no sabía qué decirle -voy a emitir tu baja médica. -Naruto negó con velocidad -no te atrevas -la chica lo vió con sorpresa -Sakura soy un gennin, tengo salario de un gennin, no puedo darme ese lujo -la pelirosa abrió sus gemas con sorpresa, nunca había reparado en esa situación, se sintió mal por el rubio -no le digas a nadie, ya veré qué hacer, promételo -la pelirosa asintió con duda -Naruto, tu salud es de importancia para la aldea, tu expediente siempre lo han tenido en su poder los kages, debes -negó con velocidad el menor -no, no lo harás, esto es algo íntimo mío, júrame que no le dirás a sensei, Sakura -la pelirosa lo vió con pesar -promete venir cada semana para revisarte, es importante Naruto -el pequeño recibió la hoja con las restricciones en comida y unos frascos de vitaminas con la receta -lo prometo, vendré cada semana -el rubio se veía nervioso, mordía sus labios aguantando un puchero.