Capítulo 21

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Renjun se sentó junto a la piscina, mirando la casa brillantemente iluminada. Podía escuchar las risas y la música, incluso desde aquí. Era el vigésimo tercer cumpleaños de Sicheng y, ya que Sicheng estaba prácticamente viviendo con los Jeong últimamente, su cumpleaños este año se celebraba en la casa de Jaehyun.

Envolviendo sus brazos alrededor de sus rodillas, Renjun sonrió débilmente. Estaba feliz por su amigo, feliz de que todo por fin iba bien en su vida. La felicidad de Sicheng había sido peleada duramente y ganada. Era agradable ver que un amor tan fuerte realmente existía y que los "felices para siempre" no eran algo de los cuentos de hadas.

Mordiéndose el labio, Renjun levantó la mirada hacia la luna. Probablemente debería volver a entrar. Pero Dios, ya estaba enfermo de estar en el extremo receptor de las miradas compasivas y preocupadas, como si padeciera una enfermedad terminal. Estaba harto de decirles a todos que estaba bien. Nadie le creía, de todos modos.

No es como si Renjun no pudiera entender que les pasaba a todos. Hasta donde todos ellos sabían, él estuvo viviendo en el infierno por los últimos meses: primero su secuestro, luego el asesinato de su padre apenas un mes después de su escape. Era mucho. Realmente lo era. Pero lo estaba enfrentando. Estaba bien. ¿Por qué sus amigos no podrían entender que su compasión y preocupación excesiva le pesaban, recordándole cosas que prefería olvidar? Cómo el hecho de que probablemente fuera su culpa que su padre estuviera muerto.

No pienses en ello, no pienses en ello, no pienses en ello.

Un movimiento en la terraza le llamó la atención. Renjun sonrió ligeramente al notar las dos altas figuras allí, cada una en los brazos del otro. Jaehyun y Sicheng se besaban bajo la luna llena, las manos de uno en el pelo del otro, las bocas voraces y tiernas a la vez. Se besaron como si se pertenecieran mutuamente.

Debe ser agradable amar y sentirse amado.

Al notar que se los estaba comiendo con la mirada, Renjun desvió la vista, hacia la lisa y oscura superficie de la piscina. Otra explosión de risas llegó desde el interior de la casa. Renjun se tragó un nudo súbito en su garganta. No por primera vez desde que regresó a Inglaterra, se sentía como un extraño entre sus amigos. No sentía que perteneciera aquí. Pero por otra parte, ya no estaba seguro de dónde pertenecía.

Si fuera honesto consigo mismo, podría ser uno de los motivos por los que se había aferrado a Johnny tan rápido. Johnny no lo conocía de antes. No sabía que Renjun era habitualmente mucho más alegre y fácil de tratar que ahora. Si Renjun estaba tranquilo y no tenía ganas de hablar, Johnny no pensaba nada al respecto. Johnny lo había apoyado a través del ajetreo casi surrealista, que prosiguió a la muerte de su padre, una presencia silenciosa y reconfortante a su lado, sin hacer preguntas ni juicios. Johnny era algo increíble. Renjun deseaba que estuviera aquí esta noche.

Quizás entonces la gente dejaría de dedicarle esas miradas. Sin mencionar que Renjun... ¿Podría extrañar a Johnny? Quizás. No estaban oficialmente juntos aún -Johnny no lo estaba apresurando, en consideración a la muerte de su padre- pero Renjun definitivamente extrañaba el coqueteo sin complicaciones, y la sensación de seguridad que la presencia de Johnny le daba.

Renjun se preguntaba si así sería como la gente empezaba a enamorarse. Esperaba que lo fuera. Johnny era un hombre en el que podría confiar para que no le rompiera el corazón. Era agradable, confiado, y refrescantemente directo y honesto. Antes de irse en un viaje de negocios a Japón, lo había mirado a los ojos y le dijo que esperaba una respuesta positiva de Renjun cuando volviera. Era algo arrogante pero encantadoramente honesto de su parte. Johnny no jugaba juegos mentales. Renjun adoraba eso de él.

Detrás de él, una rama se quebró. Renjun se tensó, la piel de gallina corriendo por su columna vertebral mientras que lo llenó un peculiar estado de alerta. Contuvo la respiración, su corazón golpeando contra las costillas. Tum-tum, tum-tum, tum-tum.

【𝖚 ┃𝖕┃ 𝖈】 ||ɴᴏʀᴇɴ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora