Cinco meses de felicidad continua y un día se agrió.
Harry pensó que por fin tenía una vida tranquila después de todo lo que había pasado. Pero no, ni siquiera un día después de atrapar al hombre que lo agredió sexualmente y puso en peligro su vida y la de su hijo, el bastardo escapó.
Severus, tras oír el alboroto, apareció al instante en el salón. -¿Qué ha pasado?-.
Harry miró a Severus preocupado -Lance escapó-.
Hubo un momento antes de que todos en la sala pudieran sentir la magia que desprendía Severus. Estaba furioso, por decirlo suavemente. ¿Cómo había logrado escapar ese imbécil? ¡No hacía ni dos días que lo habían atrapado! Severus sólo tuvo que consolar a su hijo de dos años diciéndole que no, que a su papá no le harían daño otra vez. El hombre malo no se llevará a papá. Anoche, Harry tuvo una gran recaída de básicamente todo lo que le pasó. Harry vivió una vida relativamente tranquila después de la guerra. Tener que luchar contra alguien para sobrevivir le trajo todos los recuerdos que con tanto esfuerzo trató de olvidar. Severus tuvo que acunar a su joven novio en sus brazos durante unos 45 minutos antes de que Harry se durmiera. Pierce hizo eso. Pierce rompió la vida tranquila de Harry.
-¡Severus!-, gritó una voz frenética. Severus sintió que lo rodeaban unos brazos y que un cuerpo cálido le oprimía el pecho.
Severus no se había dado cuenta de que tenía los ojos cerrados hasta que olió el aroma de Harry en lugar de ver su pelo despeinado y sus ojos verdes. -¿Harry?-.
-Estoy aquí. Respira, amor. Estás perdiendo el control-, le tranquilizó el hombre más bajo, frotándole inconscientemente la espalda. -Todavía no ha hecho nada más-.
-Todavía, Harry. Todavía nada- gruñó Severus, agarrando con fuerza las caderas de Harry, probablemente dejándole moretones.
-Severus, Sam dijo que los Aurores lo están buscando en este momento. Pronto lo atraparán-, trató de aplacar Harry a su enfadado novio.
-¿Cómo escapó esa... maldita amenaza de todos modos?- exigió Severus, sin importarle si molestaba al padrino del hombre.
Sam suspiró mientras se dejaba caer en el sillón. -Cuando llegué a la oficina del Auror, la gente ya estaba gritando y culpándose unos a otros. No supe lo que estaba pasando hasta que un tipo se me acercó y me pidió que abandonara el lugar. Pusieron a Lance en una celda de detención al menos hasta el juicio pero alguien, y creen que fue del departamento, le ayudó a escapar. Dos de los guardias fueron encontrados inconscientes-.
-¡¿Qué?!- bramó Severus, -¿Quieres decir que perdieron a un criminal de dentro del ministerio? ¡¿No tenían seguridad?! ¿Me estás tomando el pelo? ¡Ese hombre casi se lleva a Harry! Ató a mi hijo de dos años y lo silenció mientras gritaba a lo bruto!-.
-¡Severus!- gritó Harry, -¡Es suficiente! No necesitas gritarle a Samuel. Él no es el enemigo aquí. Por favor, ¡cálmate! Sebastián está a sólo dos puertas de distancia-.
Severus bajó la mirada avergonzado, escarmentado por unas palabras. No era su intención atacar a su amigo. Severus sabía que no era culpa suya. Simplemente... había recaído. Los últimos cinco meses también habían sido felizmente tranquilos para Severus y que un hombre los interrumpiera no sólo una vez, sino tres, hizo mella en su paciencia. Por algo lo consideraban el espía de confianza del Señor Tenebroso. Severus siempre controlaba sus emociones, pero nunca parecía funcionar bien con Harry Potter. Fue tonto al esperar que lo de ayer fuera cosa de una sola vez.
Severus miró a Sam y le pidió disculpas por haberle gritado. Sam se limitó a asentirle, comprendiendo por qué el hombre había explotado. -Severus, Henry. Tengo que volver al Ministerio. Tengo que hablar con los Aurores con la esperanza de poder ayudar en la búsqueda. Sólo vine a avisarte-.
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FALLING INTO PLACE
FanfictionEventualmente, todas las cosas caen en su lugar. Harry Potter desapareció después de la Batalla. ¿Dónde estaba el salvador del mundo mágico? Obviamente UA. HP/SS. Mpreg. Mucha pelusa familiar. ------------------------------------ Autor Original: new...