|| AMOR A PRIMER GUITARRAZO || HOBIE BROWN/SPIDER-PUNK X LECTORA ||

04

—¿Qué haces?

—¡Ay, coño!—cerré la libreta de un golpe—. Hobie—giré mi cabeza, encontrándome a mi compañero detrás del sofá del lobby en el que estaba sentada—. Qué susto...

—¿Dibujas?—me miró curioso, saltando el respaldo para dejarse caer a mi lado.

—No.

—Sí dibujas—se inclinó más, mirándome con una sonrisa.

—No me pidas que te los enseñe, por favor—supliqué.

—¿Por qué?—ladeó la cabeza.

—Me da vergüenza.

—Seguro que son muy buenos—dio golpecitos a la libreta con su dedo.

Aparté la mirada, viendo el lobby algo vacío, eso quería decir que no había posibilidad de que nadie más viera mis dibujos. Lo pensé unos momentos, entonces abrí la libreta para ofrecérsela.

—¿Tienes las manos limpias?—me detuve antes de dársela y vi cómo restregaba sus manos por su chaqueta.

—Seh.

—Bueno—le miré no muy convencida.

Tomó el cuadernillo antes de que pudiera retractarme, abriéndolo y pasando sus ojos detenidamente por cada una de las hojas.

Tragué saliva al sentir el ambiente tan tenso, esperando alguna reacción de Hobie.

—¡Aquí estamos todos!—señaló una de las hojas, mirándome con sorpresa—. Soy cool incluso en tus dibujos—pasó su brazo por el respaldo del sofá, dejándolo detrás de mi espalda para acercarse y dejar la libreta abierta sobre mis piernas—. Tienes un estilo increíble. Incluso la paleta de colores que utilizas...—pasó la página, mostrando unos dibujos de Pav.

—No sabía que te interesara tanto el arte—sonreí al verlo mirar los dibujos con emoción.

—Miles me ha enseñado algo—se encogió de hombros.

—¿Él también dibuja?

El moreno torció una sonrisa, sintiendo que había fastidiado el momento al mencionar a su compañero y hacer que la chica tomara cierto interés en el asunto.

—Es muy bueno—asintió—. Y la mayoría de sus dibujos son sobre Wendy—la miró con una sonrisa pícara.

—Entiendo—soltó una risilla—. Sí...—pasó la página con una mirada melancólica—. Es cierto que cuando un artista se enamora...—pasó su mano por la hoja en blanco de la libreta—nunca morirás en su arte.

Hobie la miró de reojo, parecía estar recordando algo, pero no le tomó mucha importancia al quedarse en las nubes, observando su perfil sin siquiera pretender disimular.

—¿Qué pasa?—preguntó nerviosa al sentir su atenta mirada.

—Nada—apartó sus ojos de manera tranquila—. ¿Por qué has dicho eso? ¿A caso la pequeña chica malhumorada tiene a alguien?—acercó su rostro nuevamente para presionarla.

—No—suspiró—. Ojalá. Mi madre siempre está de pesada diciendo que debería darle oportunidad a alguien, pero no encuentro a ese alguien que realmente merezca la pena—bufó con frustración—. No soy muy estricta en cuanto a "mi tipo", pero a veces siento que de verdad no estoy hecha para el amor.

—¿Tu tipo?—giró su cuerpo hacia ella, apoyando su codo en el respaldo para reposar su cabeza en la palma de la mano y mirarla con atención—. Sorpréndeme.

—No sé por qué hablaría de esto contigo—frunció el ceño, sintiendo sus mejillas calientes.

—Ya no tienes opción después de haber picado mi curiosidad.