16

1K 103 24
                                    

—¿Estás llorando?—me miró, apoyado en el cabecero de la cama.

—¡No!—escondí mi cara en la almohada.

—¿Qué pasa?—se acercó sentándose a mi lado, mirando el vídeo pausado del televisor.

—Que me he comportado como una idiota—bufé—. Lo siento.

—¿Por qué?—apoyó su cabeza en mi hombro—. No desconfiaste de mí.

—Ya, pero...—miré la pantalla.

Acababa de terminar de ver la grabación del spider-bot de Hobie. Todo tenía sentido ahora que podía ver lo que realmente pasó esa noche. Ella trató de aprovecharse, acercarse a él con la excusa de las misiones, pero él le puso un límite claro que no supo respetar.

No tienes nada que hacer conmigo. Y sobre _______, te aconsejo que no vuelvas a hacer esos comentarios si no quieres tener serios problemas—.

Él me defendió.

Tampoco tienes nada que hacer "contra ella". No se trata de ningún tipo de pelea estúpida que te hayas creado en tu cabeza. Me gusta, es un hecho, y estoy con ella, entiende la realidad de una vez—.

Le dejó en claro mi posición, lo que éramos.

—Hobie...—sollocé—. Eres... ¡No sé!

—Sea lo que sea que quieras decir lo entiendo—bufó con orgullo—. Soy un "novio" increíble.

—¡Sí!

—Lo sé—rodó los ojos mirándome con una amplia sonrisa—. Y no te tienes que disculpar por lo que pasó—se dejó caer sobre el colchón, apoyando la cabeza en sus brazos y suspirando agotado—. Bueno, a lo mejor un beso lo soluciona todo...

Perecía que no se esperaba mi reacción, porque cuando me lancé a besarle exclamó sorprendido, pero se relajó de inmediato, bajando sus manos a mi cintura para apretarla.

¿Necesitaba más pruebas para saber que iba completamente enserio con nuestra relación? A lo mejor ya estaba preparada para dar el siguiente paso. Aunque todavía lo sentía muy pronto, pero mi cuerpo reclamaba más de él.

El beso no tardó mucho en subir de tono fundiendo nuestros labios con algo de desesperación, buscando que nuestras lenguas se encuentren. Hobie deslizó sus manos un poco más y yo sonreí contra su boca al notar el miedo con el que se movía, temiendo que rechazara su tacto.

Se incorporó, apretando mi trasero para sentarme correctamente sobre él juntando nuestros cuerpos todo lo posible.

—Linda...—jadeó, tomando una bocanada de aire para volver a devorarme—. Hermosa... ¿Quieres...?

—Hobie...

No pretendía que su nombre se escapara de mis labios de aquella manera tan suplicante, como si estuviera rogando que me hiciera suya hasta que ya no pudiera más. Pero sucedió y me hizo gemir bajito al sentir su erección presionar mi entrepierna.

¿Le ha puesto que diga su nombre?

—Esto es demasiado...—dejó caer su cabeza sobre mi hombro con el cuerpo algo tembloroso—. ¿Por qué estoy tan nervioso?

—¿Hobie?

—No, espera. No digas... No digas mi nombre, por favor.

Bueno, no sabía muy bien cómo actuar en esta situación. De hecho, tenía asumido que el día que lo fuéramos a hacer él tomaría totalmente la iniciativa.

—¿Estás bien?—acaricié su espalda al sentir sus brazos rodeándome—. ¿Lo dejamos aquí?

—Lo siento...—suspiró, escondiéndose en mi cuello.

|| AMOR A PRIMER GUITARRAZO || HOBIE BROWN/SPIDER-PUNK X LECTORA ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora