-Ya estamos en casa! -anunció mi hermano con alegría. Nada más abrí la puerta entró corriendo a abrazar a mi madre, que se encontraba en la cocina.
-Hombre, mira quién ha llegado Robert!
-Nuestro chico mayor! -dijo mi padre y yo solté una risa mientras me descalzaba.
-Qué tal en casa de Lukas? -preguntó mi madre metiendo el plato de comida en el microondas.
-Super bien, hemos jugado con la consola... -fue lo último que escuché.
Me metí a mi habitación y como de repente hacía más calor, me puse un crop top acanalado blanco que era bastante fresquito y un pantalón soft de entretiempo, es decir, no era de pelo. Sí, todavía no me atrevía con manga media porque soy bastante friolera.
No me extrañaría si en un rato me pongo una chaqueta.
Me dirigí a la cocina y comí, mis padres hablaban con mi hermano sobre esos dos días que no había estado conmigo. No me gustaba mucho hablar y mucho menos con mis padres así que fue una comida tranquila al menos para mí.
Pensaba en que haría esta tarde, me gusta tener siempre algo pensado para hacer. Aunque siendo Spider-Girl siempre había algo para hacer.
Iré a la biblioteca. -se me ocurrió. No es que fuese una empollona ni mucho menos, más bien lo contrario.
Era una chica de 7-8 sobre 10 si lo ponemos con números. Algunas asignaturas se me daban mejor que otras, por eso entre Ned, Peter y yo podíamos estudiar perfectamente. Con eso me refiero a que en las asignaturas en las que a Peter y a mi no se nos daban de maravilla, a Ned sí. O viceversa. Aunque debo decir que para mí Peter era el más listo. Luego estaría yo, ya que en las asignaturas que me gustaban nadie me ganaba.
Terminé de comer y fui a mi habitación, estuve haciendo los deberes de Matemáticas, Química, Inglés y Tecnología durante dos horas y media.
Sí, se me había pasado media tarde en hacer deberes. Pero lo importante era que estaban hechos, o eso creo yo.
Salí de mi habitación para merendar, abrí la nevera para coger un plátano y la cerré. Pero cuando la cerré, me encontré con un niño rubio, si, mi hermano.
-Que quieres? No me has asustado. -recordé lo que me hizo Ned hace unos días.
-Que es jueves.
-Y eso que?
-Que me tienes que llevar a fútbol.
-Mierda. Se me había olvidado, ahora me cambió y vamos.
-No tardes. -dijo volviendo a su habitación para ponerse a jugar con sus figuritas de Hulk y de Iron Man.
Bueno, el campo de fútbol quedaba lejos, pero así me daba un paseo antes de ir a la biblioteca.
Merendé rápido y me cambié a un jersey azul y unos leggins negros. No eran muy abrigados, algo más que lo que llevaba puesto para estar por casa. Me até las converse y salí de mi habitación para llamar a la puerta de la habitación de mi hermano, pero resulta que ya estaba en la puerta.
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