Capítulo VI: Descubierta

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Hola a todos! Acá otro capítulo.

Debo admitir que me da risa yo preocupada advirtiendo que el capítulo estará oscuro, que me llego a sentir mal por lo tóxico que son algunos omegaverse y por la naturaleza en si de la historia y luego están algunas de las lectoras queriendo cambiar de lugar con Rhaenyra. Las amo jaja nunca dejan de sorprenderme. Un salud por ustedes.

Me alegra que les guste la historia. Y a los que no les gusta, believe me , los entiendo está fuertecita jeje.

No olviden comentar y votar. 

Al otro día Rhaenyra despertó tranquila como no despertaba hace mucho, se sentía en paz, se sentía relajada, sentía dolor en su cuerpo, pero sentía una paz demasiado extraña.

¿Dónde estaba?

Intentó moverse y sintió un fuerte brazo presionando contra su cintura.

Inmediatamente la paz con la que despertó desapareció, recordando la noche anterior.

Había estado tan cansada que se había rendido ante él y había aceptado sus caricias y la calma que él le ofrecía.

Se había traicionado a si misma al aceptarlo.

- Aún es temprano- dijo su voz mientras le acariciaba el cabello.

- ¿Puedes dejarme moverme? Quiero darme un baño- dijo ella y él la atrajo contra él haciéndola tensarse al sentir su miembro presionando contra su espalda. 

No quería que él la tomara de nuevo, le haría daño, ya le había hecho daño dos noches seguidas, no podría soportar sin quedar demasiado lastimada para que incluso su naturaleza la sanara.

Había visto mujeres que habían tenido que relegarse a su forma de lobo por meses para poder recuperar su salud luego de ser tomadas por alfas posesivos. Ella no quería correr esa suerte, porque sabía que con la naturaleza de su esposo, podía ser incluso peor.

- Ve, prepara la bañera para los dos, me uniré a ti en un momento- dijo él y ella apretó los puños- Atrévete a desobedecer mi orden, y no te gustará lo que pasará- dijo él y ella llevó su mano instintivamente a su marca.

Sintió las lágrimas agolparse en sus ojos, la ira porque él la obligaba a someterse  y fue hacia la bañera.

Preparó la gigantesca bañera para los dos y se arrojó al agua deseando limpiar su cuerpo a gusto antes de que él llegara.

Apartó la mirada cuando lo vio desnudo ante ella. Aún sus mejillas se sonrojaban cuando lo veía desnudo.

Él arqueó una ceja y entró a la bañera con ella invadiendo su espacio personal. 

Él se relajó en la bañera y ella sabía lo que él quería. Quería que ella lo sirviera como muchas omegas hacían con los alfas, solo que él no er aun alfa era un Enigma, se supone que ella debería sentir honor de servirlo, pero lo único que sentía eran ganas de sacarle un ojo con una esponja.

Ella no tenía idea cuanto él disfrutaba provocarla. No le interesaba que lo sirviera, pero si eso servía para molestarla y para recordarle que no podía contra él, a él le serviría. 

Ella lo ayudó a limpiarse, frotando su cuerpo con una esponja con demasiada fuerza, si a él le dolía, no le importaba en lo más mínimo.

Ella cargaba mucho más dolor y todo era su puta culpa.

Ella le lavó el cabello tirando de los platinados mechones cada vez que podía y él gruñó en advertencia. 

- Lo siento, esposo- dijo ella con evidente sarcasmo- No fue con intención- dijo ella y él la miró de forma amenazante.

El despertar de la sangre valyria (Daemyra)Where stories live. Discover now