Capítulo 11 Gramos.

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Para un cambia forma Omega o alfa, era difícil en especial a los Alfa pasar en los ciclos de calor, su parte animal era que asumía su forma sin piedad. Poder revelar su forma animal, mientras su parte humana duerme, eran pocos que podrían controlar ambas, en caso de Hyunjin.

Sentía dentro de su pecho una sensación irremediable de ser rasgado, dentro su serpiente estaba inquieta, al primero del ciclo de calor. Se encargo personalmente a su ternerito de ir por un encargo, varios kilos de carne para alimentar su parte animal.

Hyunjin cerraba la puerta de su habitación, llevándose un par de pastillas antes de presentar un cambio con un ¡Puf! La gran anaconda sale incontrolablemente, al mismo tiempo que entra a la puerta principal del departamento ____, con bolsas llenas de carne.

− ¡Hyunjin! ¡Ya llegué!...

Con el sonido en el segundo piso de su departamento sabia que se encontraba en su habitación ocupado, mientras ella va a dejar el resto de carne en la cocina. El día de hoy prepara de la cena, entre los trozos de carne se encarga de freír, hervir algunas verduras y preparar al final su sopa de fideos para comer más tarde.

En eso percibe el olor a lavanda más fuerte de lo usual, con una bandeja llena de galletas y té va hacia arriba. Pensando en el trabajo que decidió llevarse su esposo, en cada paso que va el pequeño ternero no se preparaba con lo que se iba encontrar.

Una anaconda de tres metros que se prepara para atacar al dulce aroma de ternero, la chica llamaba a la puerta avisando que iba a pasar a dejar un bocadillo, la serpiente siseando con su lengua prepara sus colmillos, se arrastra para estar más cerca de la puerta que de pronto se abre y causa un portazo al pobre animal.

− ¿Hyunjin? −Dice ella viendo alrededor− ¿Hola? ¿Estás en el baño?

Al no conseguir respuesta entra a la habitación cerrando a la espalda, dándose cuenta de la enorme serpiente que se encuentra noqueada en el suelo moviéndose como gusano. La chica deja la bandeja en la mesita baja para inclinar y ver de cerca la serpiente.

Varias ideas pasan por su mente y antes de que pueda tomar la guitarra eléctrica del compositor para terminar de noquear a la serpiente, pasa por su mente su alfa. Su ciclo de calor se acercaba y le había avisado que seria en cualquier momento, nunca pensó que fuera ahora.

−Jajaja, eres muy bonita. Hola serpiente, bebé. −Dice ella tomando a la ligera a la serpiente hasta llevarla a la cama− ¿Eres tú Hyunjin? ¿Hyunjin?

La larga y pesada serpiente sisea mil y una forma para que el ternero la soltara, además que sus dientes que se habían estampado dolían demasiado para mostrarlo, dejándole por ultima alternativa rodear con su cola la cintura de omega que se ríe de los siseos de la serpiente.

−Pobrecita. ¿Te pegaste con la puerta? −Pregunta− Que cariñoso eres, me recibes con un abrazo. ¿Te gustan los cariñitos? ¡Yo también quiero darte un abrazo!

La serpiente se sentía enloquecer, dejo de apretar el cuerpo del ternero para recibir el ahogado abrazo que casi le saca el aire. Terminando la primera tortura sigue la siguiente, en que la chica se pone de pie para llevar arrastras a la serpiente que sisea deseando que la suelten.

−Debes de tener hambre. ¡He preparado la cena! −Dice ella hablando con la serpiente–, Hyunjin dijo que te alimentara.

La serpiente que pierde sus fuerzas se siente su cabeza recargada sobre el hombro de la chica que sirve la comida, a pesar de que este rodeado su cuerpo con la longitud de una anaconda, va a buscar asiento en el sofá, como ultima voluntad la serpiente que intenta huir al ver la cucharada de carne.

−No sabe tan mal, son brochetas de cordero. −Dice ella dándole la primera cucharada− Uhm.~ ¿Vez? Suculenta. Que buena anaconda eres Alfa.

Brownie [🐄] Hyunjin y tu OMEGAVERSE ¡TERMINADA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora