The Boy Is Mine +18 | PEDRI GONZÁLEZ

Extra

La despedida de soltera.

Cuando me levanté, vi a Sira mirarme desde una esquina.

Me dio un infarto.

Bueno, eso se quedó corto.

Porque miré a otro lado y me encontré a los chicos con mi ropa puesta. 

Que obsesión.

Después de ver a Pedri con mi ropa no podía esperar algo más sorprendente de su parte.

- Oye dejad de mirarme y quitaros mi ropa.

Ellos me ignoraron y después me cogieron entre todos para meterme al baño.

Nos quedamos Sira y yo encerradas.

- Deberías vestirte.

La miré confundida.

- ¿Que cojones os pasa Sira?

- Hazme caso.

Después salió del baño.

Miré la ropa que me habia dejado.

Unos pantalones cortos vaqueros con un top plateado.

Me lo puse a regañadientes.

Cuando salí me miraron de arriba a abajo.

Me pusieron unas sandalias plateadas y bajamos.

Pedri no estaba por ningún lado.

Quise gritar a ver si alguien me escuchaba.

No lo hice.

Después me subieron al coche, donde me obligaron a sentarme en el medio.

Rodeada de ellos.

Fantástico.

Llegamos a algún lado.

Me bajaron y entramos a un club.

Todas las luces eran de Neón, por lo que no veíamos mucho.

Entramos en una mini sala y me pusieron un sombrero vaquero.

Después me sentaron en una silla.

Comenzó a sonar música.

Pony de Ginuwine comenzó a reproducirse.

Ya sabía de que iba esto.

Quise levantarme pero la mano de alguien en mi hombro me lo impidió.

Miré mal a la persona y me encontré a Gavi.

- Esto no me hace ni pizca de gracia.

El se rió.

- Es tu despedida de soltera, disfrútala.

Quise no reírme pero me emocionó saber que mañana me casaba y que ellos me habían montado una mini fiesta con tíos guapos.

Luego escuché gritos de chicas y me di cuenta de que eran mis londinenses.

Quise gritar yo también.

Nos abrazamos y después los vi a todos con serpentinas y gorros de fiesta.

Me reí.

Entonces las chicas miraron al pequeño escenario detrás de mi.

Vi como a Becca se le caía la baba.

Así que me giré.

Y no vi a nadie más que a mi prometido.

Me quedé embobada mirándole.