Miro por última vez mi cuarto. Cuarto en el que alguna vez jugué con mi padre, cuarto al que me hermano solía venir en las noches a leerme un cuento ya que mamá nunca tenía tiempo, cuarto en el que llore días y noches por su muerte, cuarto en el que...
¿que hacemos aqui?- le pregunto a owen cuando aparca al frente de un edificio alto.
- ya lo verás princesa - es lo único que me dice, toma mi mano y en silencio empezamos a caminar hasta la entrada.
- confias en mi? - me pregunta y sin dudar asiento -bien- no dice nada más y veo como saca un pañuelo de su bolsillo y empieza a ponerlo alrededor de mis ojos.
A este punto estaba poniendome nerviosa pero no le pregunte para que me vendan los ojos.
Owen:
Al terminar de vendarle los ojos a mí hermosa peli negra la la levantó en mis brazos y sin decir nada me dirijo al ascensor el cual nos lleva hasta la última planta del edificio, donde se puede ver toda la ciudad y la sorpresa que tenía para mí princesa.
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Le quitó el pañuelo de los ojos y veo como ella lentamente mira todo con un brillo en sus ojos.
- Owen, esto es....., esto es precioso - me dice con lágrimas en los ojos.
-te quiero mucho muñequito - me dice con una tierna sonrisa y nada más verla feliz hace que me olvidé de todos mis problemas.
- yo te amo princesa - y sin decir nada más la atraigo hacia mis labios.
La besó suave, despacio, me permito sentir cada parte de sus delicados labios.
Poco a poco los besos van subiendo de intensidad, ella se separa de mi y sin despegar su vista de la mía empieza a desabotonar mi camiseta mientras que yo lentamente la despojo de su vestido, solo somos ella y yo y el frió viento de nueva York.
Admiro su hermoso cuerpo, sus anchas caderas, sus perfectas piernas largas, su perfecta cintura y abdomen y el tamaño perfecto que tiene sus senos, todo de ella es tan perfecto, a mis ojos parece irreal, es la perfección en persona.
Nuestras bocas vuelven a juntarse, la levantó haciendo que ella enrolle sus piernas en mi cintura y la llevó hasta donde están las mantas, y con delicadeza la acuesto sobre estas, lo único que lleva puesto es una sexi lencería negra la cual rompo dejando completamente expuesto su cuerpo.
-princesa... Estás segura?-
-hazme tuya Owen- me dice con la voz agitada y justo como ella dice así lo hago.
Empiezo a chupar sus rosáceos pezones mientras que lentamente voy bajando por su abdomen dejando un rastro de besos húmedos. Beso sus muslos y siento como ella pone sus manos al rededor de mi cabeza desesperada por que le de atención a su intimidad.
Empiezo a dar lengüetazos de arriba a abajo en su coño, me dejó llevar del exquisito sabor que esté tiene, introduzco dos de mis dedos en su canal mientras que con mi lengua le dio atención a su clítoris con lengüetazos fuertes que la ponen la mil, el sonido de sus gemidos hace que mi polla se ponga demasiado dura y sin pensarlo la saco y la entierro en su estrecho coño.
Es tan apretado pero se adapta tan bien a miembro.
- Owen..., m-mas rápido - me ruega alana y eso hago, la embisto con fuerza, haciendo que sus gemidos sean aún mas altos, chupo sus senos, beso sus labios y en medio de respiraciones agitadas, nos venimos los dos.
Fue su primera vez y quise que fuera especial, solo ella y su disfrute, solo la yo y la mujer con la que siempre soñé, ella es perfecta, las cicatrices de sus muslos solo demuestran lo fuerte que es por lograr salir de la mierda que son las autolesiones, solo demuestran que fue una adolescente con problemas y que pudo salir adelante, siendo una guerrera. Por eso y más es la mujer perfecta.
- dios, eso estuvo tan bien owen - me dice con una sonrisa y aún con el cabello todo desorganizado y la piel sudorosa es la mujer más preciosa joder.
-te amo princesa, tenlo siempre claro - le digo y ella en respuesta me besa dando paso a una segunda ronda de la cual terminamos aún más cansados.
-muñequito, feliz cumpleaños - me dice y caigo en cuenta de que ya es mi cumpleaños, son las doce de la noche y aún sigo con alana, su compañía me transmite tanta calma.
-gracias princesa- le agradezco con un beso.
- tú regalo está en el departamento, espero que te guste cuando te lo dé - me dice un poco tímida.
-me va a encantar ya lo verás- le digo y eso hace que ella se relaje un poco más.
Luego de estar un rato más con alana la llevo devuelta a los dormitorios, le insiste en que durmiera en mi departamento pero me dijo que no porque tenía que hacer unas cosas, quién sabe ahora que se estará tramando.
Al llegar a mi departamento veo que Harry está dentro y no se que mierda hace jodiendo a las tres de la mañana en mi departamento.
-que coño haces aquí?- le pregunto cabreado.
Ni siquiera me ha dicho "feliz cumpleaños"
-fui muy claro contigo Owen, o la dejas o hago pública toda la vida de la mojigata de tu novia, y sabes que bien que ella no podrá con eso y terminará saltando de algún edificio.
Siento como me hierve la sangre, alana es muy fuerte yo lo sé, pero el que se filtre su vida y todo el mundo hablé de ella será una carga muy grande para ella.
- o terminas con ella y vuelves con victoria, o te quedarás con el remordimiento de que por tu culpa ella se suicidó, porque sabes bien que eso es lo que pasará.
-porque? Porque siempre tienes que arruinar mi felicidad padre? - le pregunto preso de la impotencia.
- no seas dramático hijito, solo hago lo mejor para mantener el estatus y el legado de esta familia, por cierto, feliz cumpleaños - y sin decir nada más, se va, dejandome con la peor sensación en el pecho que pudiera haber experimentado
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Holissssssss
Yo sé que estuve desaparecida muchooo tiempo, les pido una disculpa, estaba haciendo unos cambios en la historia.
He decidido que lo mejor para el libro es dejarlo independiente, no tendrá más partes.
Espero y lo entiendan.
Les aviso que deberán preparar los pañuelos y el psicólogo porque lo que se viene acabara con la estabilidad emocional de todos (incluyendo la mía)
