MAGICKEY | JJK [+21] ©

|Capitulo 41| Libertad.

—Voy a acompañarte— dije tomando mi bolso.

—¿No tenías cosas que hacer?— preguntó confundido.

—Esta es una de ellas— respondí sonriendo —. Necesito hablar con ella hércules, tengo muchas preguntas que sólo desaparecerán si hablamos.

—¿Y yo no puedo saber de qué hablarán?

—Deja de ser chismoso— reí.

—Bueno, lo intenté— suspiró pesadamente tratando de persuadirme, cosa que no logró.

Dándose por vencido, por ahora, nos encaminamos a su auto para dirigirnos al hospital donde se encontraba So-hee, según el nuevo doctor que atendía su caso debería de poder comunicarse sin tener ningún ataque, además de que le haría bien ver rostros que conoce aunque nosotras no éramos amigas, a ella le gustaba Jungkook y yo era su prometida... Ahora que lo pienso, tal vez ésto sería más difícil.

Al llegar, nos encontramos con los chicos que habían terminado su visita, estos nos saludaron antes de dirigirnos a su habitación.

—Mejor ve tú primero— le dije al pelinegro —, habla con ella, distraela un ratito, yo... voy a comprar unas gomitas.

—¿Estás bien?— preguntó tomándome de las manos, yo asentí bajando la mirada —, no te creo cherry, te conozco muy bien.

—Es que...— suspiré —, no sé si vaya a querer verme, soy tu prometida, estoy embarazada y a ella le gustas.

—Pero te recuerdo que también estuviste a su lado en todo este proceso— dijo levantando mi cabeza —, y te agradezco por eso, eres una increíble persona.

Sólo pude sonreír ante su comentario, amaba que me dijera esas cosas ya que me animaba hasta en los peores momentos, él era una de las personas que más me conocía, nunca jamás podría mentirle ni siquiera lo intentaría.

—Traéme unas gomitas a mí también entonces— rió contagiandome también.

—Hecho— dije asintiendo sin dejar de sonreír.

Una vez que ingresó a la habitación yo me dirigí a la cafetería en busca de mis dichosas gomitas a parte de un buen jugo de manzana, pagué todo lo que había pedido y me senté en una de las sillas del lugar junto a la gran ventana, necesitaba pensar como comenzaría la conversación, debía darle tiempo al pelinegro para que hablara con su amiga, sabía que lo necesitaba y que a pesar de todo lo que había pasado anteriormente, le tenía un aprecio gigantesco.

—Hola— escuché una voz detrás de mí provocándome un respingo por sorpresa —, lo siento, no quería asustarte.

—¡Casi le sacas el bebé Nam!— dijo el de sonrisa cuadrada dándole un leve manotazo a su amigo, solté una carcajada por su comentario y negué divertida.

—¡Ya dije que lo sentía!— se defendió devolviéndole el pequeño golpe.

—Está bien— sonreí mirándolos a ambos —. Pensé que ya se habían ido...

—Y nosotros pensamos que estabas con JK— habló el mayor.

—Él necesitaba tiempo con su amiga— llevé otro osito de goma a mi boca mientras dirigía mi vista al ventanal.

—¿No estas celosa?— preguntó el de sonrisa cuadrada.

—¿Mmh?

—También tenía esa curiosidad— concordó su amigo.

—¿Por qué lo estaría?

—Ya sabes... Jungkook y So-hee estuvieron juntos, ella dijo cosas que no le correspondían en Corea, pensé que te molestaría— habló apenado.