Nagi es un tesoro perdido, uno que Reo Mikage perdió y que talvez no volverá a recuperar.
Reo encuentra una bestia (o talvez dos) en PXG.
¡Oh-Oh!
Mikage Reo quiere jugar para PXG, quiere arriesgarse y perseguir a aquella bestia.
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- Bueno...esté...y como está todo en Manchester? - pregunto algo incomodo Reo, hacé rato que el y Chigiri estaban caminando en silencio, y no era uno para nada cómodo.
- Bien creo, Chris nos aumento más los entrenamientos, Nagi anda más bago que de costumbre y el nuevo miembro al parecer está interesado en el. - contó con poco interés en lo dicho.
- Uhm, bien por el entonces...- bebió de su botella, aún no se había bañado y el sudor comenzaba a molestar le.
- ¿Bien por el? - Reo asintió, provocando que el pelirosa pestañara varias veces seguidas. - ¿Reo estás bien?
- Si, ¿porqué la pregunta? - no pudo evitar levantar una seja ante la pregunta del más bajó.
- Porque bueno, te acabo de mencionar que alguien está interesado en Nagi y a ti parece que no te importa.
- Si me importa, pero si Nagi está interesado también el alguien más, no le puedo hacer nada...- se apoyo en la pared mirando al pelirosa.
- ¿Reo te sientes bien? - nuevamente comenzó a pestañas con asombro. - siento que el Reo de hace unos meses estaría rompiendo otro cepillo de dientes en el baño si le dijera esto.
- Ah, bueno ¿Gracias? Debo tomarlo como cumplido o insulto? - contexto con una risa ahogada al final.
- No lo se, la verdad no lo sé - al igual que el pelimorado soltó una risa y se paró junto a el.
- Debía verme patético en ese entonces...- había una sonrisa en sus labios, pero su mirada apagada decía lo contrario.
- Mmm, puede ser, pero vamos mírate ahora, nunca te había visto sonreir tanto como hoy en la cafetería - empuja su hombro con el del pelimorado, haciendo que suelte una carcajada.
- ¿Eso crees? Bueno, la verdad es que los chicos han sido bastante divertidos, hicieron lo posible para que me adapte en el complejo de francia.
- eso parece, pero la próxima vez que tomes una decisión así, avísame, ese día casi me da un ataque cardíaco.
- jajaja, si, lo haré y lo siento, por no haberte dicho sobre el cambio - sonríe avergonzado.
- Tranquilo, no hay rencores. - contesta devolviendo la sonrisa.
Por unos momentos hubo un silencio cómodo, Reo miraba sus pies distraída mente, mientras Chigiri acomodaba su cabello en una trenza que al parecer se estaba desarmando.
- Por cierto...- dijo el pelirosa, recibiendo un tarareo en respuesta dándole a entender que lo escuchaba. - ¿Que hay entre Rin y tú?
Reo cree que casi se le salen los ojos al abrirlos con sorpresa por la pregunta.
- No hay nada entre nosotros, ni siquiera se nos podría llamar 'amigos' - miró hacia cualquier lado excepto al pelirosa, quién lo observaba atentamente. - ¿Porque lo preguntas?
