Nagi es un tesoro perdido, uno que Reo Mikage perdió y que talvez no volverá a recuperar.
Reo encuentra una bestia (o talvez dos) en PXG.
¡Oh-Oh!
Mikage Reo quiere jugar para PXG, quiere arriesgarse y perseguir a aquella bestia.
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Sae escuchaba totalmente irritado los gritos de la gente que había en la cafetería, quería irse lo antes posible y dejar de oír a todos esos idiotas gritando por un estúpido partido, igual de insignificante como todos ellos.
Camino por el medió de la cafetería, paso frente a una mesa ocupada por dos mujeres, normalmente siempre se levantaban e intentaban acercarse a el, está vez no fue así y realmente estaba agradecido que fuera así, detestaba lidiar con los fans.
- ¿Quién crees que gané? Llevan 1-1 desdé los primeros 30 minutos y ninguno deja que el otro atraviese sus defensas. - Escucho que decia una de las chicas, está golpeaba la mesa de mármol con sus uñas, ansiosa.
- No lo se, esto es intenso, los encuentros en el campo están bastante increíbles! - Comentó la otra en respuesta.
Sin interés alguno, las pasó por alto, llendo directo al mostrador a pagar.
El chico en el mostrador al parecer no había notado su presencia mientras miraba fijamente la pantalla en unas de las paredes del pequeño local.
- Oye. - Lo llamó, haciendo que el chico volviera a poner atención frente a el, quién apenado lo miró y le dió su tiquet con la cuenta.
Cuando iba saliendo escucho un gritó con el nombre que no quería escuchar.
- ¡Eso! ¡VAMOS RIIIIIIIIIN!~ - Arrugó la nariz ante el gritó de un niño, talvez de unos ¿Díez a Catorce años? No lo sabe, pero era joven.
Luego vió la pantalla a la que el niño gritaba desesperado, arrugó la nariz un poco más al ver a su hermano, suspiro sin interes saliendo del café.
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Todos corrían desesperados por la victoria de esté juego, en los primeros 30 minutos quedaron empatados, ahora sólo querían anotar y ganar, no hay nada más aquí.
Ahora Isagi llevaba el balón en sus manos, con Reo peleando por un lado y Kaiser queriendo el balón también, para anotar por su cuenta.
- ¿¡Que mierda Inbecil!? - Le grito Isagi, furioso a Kaiser.
- Lo siento Yoichi, pero aquí yo anotaré un gol y daré la victoria.
Kaiser y Isagi se empujaban mutuamente, olvidando la presencia de Reo junto a ellos, esté aprovechó el descuido de ambos para robar el balón.
Logrando lo con un poco de esfuerzo, debido al movimiento entre ellos.
Rápidamente dió a correr en la otra dirección, ahora quería anotar un gol el, no quería sólo estar aquí y ayudar a hacerlo, el también necesitaba anotar almenos uno. Sin notarlo una sombra apareció a su lado, empujándolo bruscamente y provocando que perdiera el equilibrio, al voltear pudo reconocer de inmediato quién era.
- ¡Muévete y dame el balón carajo! - Habló con agresividad, provocando que el pelimorado frunciera el entre cejo.
- Sueñas si crees que lo haré. - Contexto, notando que prácticamente estaba siendo acorralado por Raichi y uno más de sus compañeros.
