Between Us | TK

Capítulo 7

Jungkook despertó a mitad de la noche por las voces que se escucharon hasta su habitación, demasiado lejanas para estar en la cocina o en la sala de estar, pero a la vez tan cercanas como para que provinieran desde fuera de su casa.

La rareza de la situación le hizo ponerse de pie entre toda la oscuridad que solo era perturbada por un poco de luz de luna, la vista lejana del cielo mostrándole que aún faltaban un par de horas para que tuviera que despertar.

—¿Y por qué su alteza busca que nosotros lo hagamos? —la voz de su padre robó su atención cuando el omega con cuidado cerró la puerta de su habitación detrás de él, pero lo que le escuchó decir a la voz que no pudo reconocer, lo despabiló por completo.

—No es que ella lo haya solicitado específicamente, pero el encargado oficial del palacio ha sido despedido esta misma mañana por unos problemas que tuvo con otros empleados —una mujer con una voz calmada, le hizo mirar hacia la puerta, en donde su madre también se encontraba de pie y atenta a la conversación—. Queremos un solo trabajo por la urgencia de las circunstancias, así que algunos contactos de confianza nos dijeron que lo buscáramos a usted, que podría darme una solución instantánea.

Sus padres se miraron brevemente, y en cuanto los pasos de Jungkook se hicieron escuchar lo suficiente como para ser percibido por ambos, el alfa mayor le incitó con su mano para que se acercara.

—Yo soy quien fabrica todos los zapatos que hay en mi tienda, pero el encargado de hacer restauraciones hasta casi recuperar el estado original de los productos, es mi hijo —su padre le hizo un espacio frente al marco de la puerta, y el omega se sonrojó por tener la misma ropa con la que durmió cuando vio a una mujer y un hombre perfectamente vestidos, como si no estuvieran ahí a altas horas de la madrugada—. Creo que él sería quien podría decirle si es posible terminarlo a tiempo o no.

Jungkook miró con atención a los dos desconocidos frente a él, y se dio cuenta que probablemente ambos venían del palacio al notar el vehículo de apariencia costosa y elegante detrás de ellos, encendido como si tuvieran prisa por terminar la visita.

—Joven Jeon —la mujer llamó su atención que estaba un poco dispersa por recién haber despertado—. Disculpe que interrumpamos su sueño y el de su familia, pero la hija menor del rey y la reina tiene un evento importante mañana mismo, por lo que estamos un poco desesperados por tener un par de zapatos viejos lo más presentables posible. Ya hemos buscado en diferentes lugares para que también nos den servicio, pero todos se han negado por el miedo a estropearlos. Estos en especial tienen un gran significado emocional para la pequeña Saehee.

Jungkook parpadeó aturdido cuando se le tendieron unos pequeños zapatitos blancos con detalles muy pequeños y bordados, seguramente a mano. Los detalles estaban apunto de romperse y habían partes que comenzaban a despegarse.

La familia real debía tener todo el dinero del mundo como para solo comprar unos nuevos, por lo que su valor emocional debía ser...

Era una tarea muy importante.

—¿Cree que pueda hacer algo? —el otro hombre dijo con deje de desesperación mientras el omega los examinaba, robándole una mirada de soslayo para notar su rostro preocupado. Jungkook se preguntó internamente qué tan cercanos serían con la realeza para que compartieran esas expresiones ansiosas—. El dinero no es problema, deben de saber. Solo queremos que estén listos para mañana mismo.

Lo veía bastante posible, aunque iba a costarle.

—Puedo hacerlo —Jungkook dijo bajito y con la voz un poquito ronca después de su descanso interrumpido—. Estaría encantado de poder servir a su alteza, así que pueden confiar en que los tendré listos para mañana a esta misma hora.