capitulo 34

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He intentado todo este tiempo mantenerme alejado de ella, darnos espacio a ambos para poder seguir adelante, para que ella siga con su vida y pueda ser feliz, mientras yo me hundo cada vez más en la miseria que es no tenerla.


Le pedí a mi primo que la vigilara, que la cuidara por mí, me quede muy preocupado después de ver a Maite, siempre creí que la había matado, aunque de cierta forma lo hice, porque lo que nosotros tenemos no se le puede llamar vida.


Lucy sabe lo que soy y que también es Ian, aun así son amigos, pero de mí no quiere ni que me mencionen, no por ser lo que soy, sino porque, bueno, yo "mate" a su hermana y también le rompí el corazón a ella o al menos es lo que me dijo Ian, le dolió, no lo demostró, pero le dolió mucho que no la detuviera en el aeropuerto, que me alejara y claro ahora me odia sobremanera.


Ahora estoy aquí, tirado en el piso de la sala con una botella de vodka en la mano, intentando ahogar su sonrisa con el alcohol, escucho como tocan la puerta, pero no quiero abrir, no quiero ver a nadie, quiero ahogarme en el alcohol, quiero darme valor para clavarme la estaca que tengo en mi cuarto... quiero morir.


-Fred, Fred soy Ian abre


-vete déjame en paz


-¿estas bebiendo otra vez? Carajo, abre


-¡que te vayas maldita sea!


-ok, solo quería decirte que te puedes morir tranquilo, porque Lucy muy probablemente a estas horas ya sea novia de Ezequiel


Escuche sus pasos cuando se alejaba de la puerta, no podía creerlo, ella no podía tener novio, no podía querer a nadie más que no sea yo, las lágrimas comenzaban a brotar sin mi consentimiento, arroje la botella contra la puerta y grite, grite y llore.


-no puedo perderte


Salí por la ventana y fui a su casa, no la encontré, estaba vacía, le mande un mensaje a Ian preguntándole en donde estaba Lucy, tardo como cinco minutos en contestarme con un largo mensaje diciendo que debía dejarla, que yo mismo había dicho que me quitaría del camino para que ella fuera feliz, y bla bla bla, pero al final me dijo en donde estaba.


Corrí lo más rápido que pude y en poco tiempo llegue, los encontré cerca de un lago en un parquecito, se veía preciosa, usaba vestido aunque ella los odia, él estaba de traje y yo apestaba a vodka, me acerque a ellos con la intención de armar un escándalo y dejarles a los dos y al mundo entero que Lucy Monroe es mía, si MIA.


Estaban sentados en el pasto, comiendo y platicando de un montón de cosas, se nota que se gustan, pero no permitiré que nada de esto suceda, para nada ella regresara a mi lado, de pronto él se puso de pie y la ayudo a ella a hacer lo mismo, la tomo de las manos y allí paso. ¡se le estaba declarando!


-Lucy, hace ya tres meses que nos conocemos y debo decirte que desde que te vi, pensé que eras la chica más hermosa que jamás había visto, luego te fui conociendo y me di cuenta de que eres mucho más que una carita de ángel, eres lista, divertida, fuerte, en fin la lista podría seguir y seguir y no terminaría, no te mentiré, soy un imbécil que ha hecho sufrir a varias antes, pero, te prometo que a ti, jamás, te haría daño, tal vez con esto último pienses que sería mejor alejarte de mí, pero me gustas, no solo físicamente, me gustas en cada aspecto, me gustas por todo lo que te hace ser tú, tus virtudes, tus demonios, todo, yo te quiero y aquí te pido que aceptes ser mi chica, que aceptes ser... ser mi novia.


Vamos eso es cursilería barata, yo le declare mi amor en Paris, en la torre Eiffel, eso sí es romance, "te dijo que si por que la hipnotizaste, no por que en verdad te amara", esa estúpida vocecita otra vez fregando, no se para que aparece si de todos modos la ignorare, ella le dirá que no, que solo lo quiere como amigo porque en realidad me ama a mí, que no puede olvidarme.


Seguí mirando, esperando por segundos que parecían una eternidad, una lagrima rodo por su mejilla.


-sí, te dirá que no niñito bonito


Comenzaba a alegrarme cuando ella asintió con la cabeza, lo abrazo y se besaron, si, se estaban besando, él estaba gozando de los dulces labios de mi Lucy, esos labios que eran y siguen siendo mi delirio, al parecer, él es mejor que yo, ja, claro que lo es, él es normal, él es un humano, él está vivo y yo, yo no le puedo ofrecer nada más que la promesa de mi amor.


Cuanto no daría por poder ser el, por poder besarla, acariciarla, por tenerla cerca un momento, por decirle cuanto la amo, porque ella me dedique una sonrisa, ahora, el juego termino para mí, no pude hacerla feliz y perdí la oportunidad por intentar hacer lo que creí que era correcto, solo me queda hacer la promesa silenciosa, de dejarlos ser felices, y jurar que si ella derrama una sola lagrima por su causa, lo torturare de la manera más cruel y lo matare lenta y despiadadamente, le entregare mi felicidad a ambos, me sumiré en las sombras del olvido para que ella no sufra más.


Moriré...


"por coincidencia te conocí, por suerte me amaste, por idiota te perdí y por amor te dejo ser feliz sin mí, bendigo al que ahora ocupa mi lugar y aunque anhelo recuperar tu amor, me apartare pensando en lo feliz que sería si yo fuera el"


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lo prometido es deuda aquí el segundo capitulo del día, pero quiero pedirles como un favor que escuchen la canción que puse arriba, es una banda nueva, mexicana, estos muchachos va empezando y son muy buenos, les dejo el link de la banda por si les interesa saber mas sobre ellos, aprendan su nombre por que pronto no dejaran de escuchar sobre ellos...

 

LUNA DE SANGREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora