Malditamente Enamorado [Terminada]

Capítulo 10

Heydi Morrison

  Si hay alguien que sea un completo estúpido ese es mi hermano.

  - ¿Cómo se te ocurre hacer eso Conner Morrison?

  - Es que yo...yo

  - No tienes justificación. Pensé que te conocía completamente, pero esta versión acosadora de ti, no la había imaginado.

  - ¡No soy un acosador!

  - No me digas.

  - Bueno, no soy un acosador como los demás.

  - ¿Es que existen tipos de acosadores?

  - Claro que existen.

  - ¿Entonces qué tipo de acosador eres?

  - Soy de los que no secuestran ni amenazan.

  - ¡Qué bien que no se te ocurrió secuestrarla! ¡Eso sí sería lo último!

  - Nunca le haría daño a Hana.

  - Hermanito se que eres cualquier cosa menos un agusador.

  - Nunca le levantaría la mano a una mujer.

  - Ahora simplemente dale tiempo. Ella necesita estar sola y pensar.

  - ¿Fui un estúpido, verdad?

- Completamente. ¿Qué? Tu querías mi opinión y es esa.

  Dejamos el tema ahí. De nada servía volver a meter el dedo en la herida. El daño estaba hecho ya y ninguna cosa que hiciéramos lo podría cambiar. Se que mi hermano fue un completo tonto pero al menos tiene buenas intenciones con Hana. Yo sé que él está completamente enamorado de ella. Ahora entiendo el por qué del brillo que poseían sus ojos cuando nos dirijamos aquí. Él ya la había visto y se había enamorado de ella.

  Llegamos a la casa y cada quien se dirigió a su cuarto. Él necesita estar solo. Necesitaba tiempo para pensar y por supuesto que yo no estorbaria.

  - ¿Sabes que a mí no me estorbas? - Dijo él susodicho entrando a mi cuarto.

  - ¡CONNER! ¿Podrías dejar de escuchar mis pensamientos? - Era muy molesto que él hiciera eso, algo que hacía con frecuencia. Con el tiempo aprendí a poner una barrera para que no escuchará mis pensamientos. Solo lo usaba en situaciones extremas como ahora, lo que está vez se me olvidó hacerlo. Cosa normal en mí.

  - Entonces pon la barrera o deja de pensar tanto.

  - ¡Por Dios Conner! Somos personas y las personas piensan.

  - jjj, está bien y volviendo a lo de antes, es verdad, tu a mi no me estorbas, eres mi hermana y para mí es reconfortante saber que te preocupas por mí. Así que, deja de pensar así. Es verdad que necesito pensar en que haré para reconquistar a Hana. ¡Oye, tu podrías ayudarme!

  - ¡Yooooo!

  - ¡Obvio! Eres una mujer, así que sabes que es lo que les gustan a las mujeres.

  - Bueno, ahora mismo no tengo idea de nada.

  - Si te llega alguna idea ¿ me avisas, ok?

  - Ok, ahora déjame terminar mi tarea.

  - Sí, "estudiosa".

  - No entiendo el por qué de las comillas, si tú más que nadie sabes que yo estudio.

  - Como tú digas.

  Diciendo eso y poniendo los ojos en blanco se marchó de cuarto. La verdad no tenía idea de cómo hacer que Hana lo perdonará.

  Casi la noche entera me la pasé imaginándome que podía hacer para que Hana y mi hermano se arreglasen. Como podía dar mi hermano una explicación que justificara lo que hizo, a veces me pregunto si él es tonto o se hace el tonto. Conner lo único que ha logrado con esto es que se me exprima el cerebro.