10 años después...
Ballister se encontraba completamente dormido, o al menos así era hasta sentir como una de las personas más importantes de su vida, dejaba cortos y cálidos besos en su mejilla para luego irse a sus labios
—Despierta—Susurro Ambrosius antes de dejar más besos en sus labios, Ballister sonrió y cuando el rubio volvió a acercarse enredo sus brazos alrededor de su cuello para dar un beso profundo
—Buenos días mi amor, ¿Por qué tan cariñoso hoy?—Ambrosius dejo otro beso antes de irse al baño, Ballister se talló los ojos antes de ponerse sus pantuflas, se detuvo en el pasillo para ver distintas fotos en familia para después bajar a la cocina encontrando a su hijo e hija
—¿Qué tal la noche con Ambrosius pa?—Ballister beso la frente de su hija para luego ayudar a su hijo a servir el café
—Ambos disfrutamos la cena, Ambrosius también es tu papá, sabes lo mal que se siente cuando no lo llamas de esa forma—
—Si lo sé, pero esa es lo forma que encuentro para que no se confundan cuando le hable a alguno—Alan rio cuando una idea paso por su cabeza
—¿Qué da tanta risa, hijo?—
—¿Te gustaría que te diga mamá?—Al decir aquello Alan se ganó un golpe leve con un trapo, sin embargo, al final padre e hijo rieron, Ambrosius tardo un poco en bajar y la familia se sentó a desayunar
—¿Cómo vas con la carrera hijo?, ¿Has conocido a alguien?—Ambrosius intento hacer plática con su hijo, el cual casi se ahoga con el café por la última pregunta
—Bien pa, sobre lo otro, por ahora prefiero estar así, no quiero involucrarme con alguien—Alan giro un poco su taza antes de mirar a Ballister y sonreír—Veo que aun las conservas—Ballister toco sus piercings falsos—Nimona las desecho, ¿no es así?—Menciono en un tono más apagado, Ballister hizo una mueca para luego mirar a su esposo, Ambrosius tomo de la mano a su hija para ir por su mochila dejando a ambos solos
—¿La extrañas?—
—Pues sí, digo después de todas las cosas que pasamos juntos desde muy pequeños y ahora ya no vive aquí, casi se cumple un año, pero se sigue sintiendo extraño—Ballister se levantó de su lugar y corrió a su habitación para sacar la caja con los piercings que Nimona supuestamente había desechado, al verlos sonrió de forma nostálgica y bajo con la caja, una vez llego y le dio la caja a Alan este abrió sus ojos sorprendido
—Si son de tu agrado puedes ponértelos, así llevarás algo de Nimona y algo que puedes compartir conmigo—Cuando menos se lo espero, Alan lo abrazo con fuerza y se aferró a él, así como hace varios años—Siempre serás un niño para mí, no importa si tienes 20 años o más—Alan asintió y se fue del lugar junto a su hermana para dejarla en la escuela y el irse a la universidad
Ambrosius abrazo por la espalda a su esposo para besar su cuello, Ballister se estremeció ante el contacto, Ambrosius sonrió al ver a su esposo así y lo giro para quedar frente a frente, el rubio miro al moreno con un brillo en sus ojos
—Es temprano, además ya estoy viejo y oxidado—Ambrosius rio bajo por lo dicho
—Vamos, sigues siendo genial en la cama mi amor, y ya sabes que me prende tu bigote y barba, te hace ver más sexy, me alegra que te esté volviendo a crecer—Ballister beso los labios de Ambrosius, el cual tomo las mejillas del moreno—Prométeme que no vas a volver a rasurártelo—El moreno asintió mientras acariciaba el cabello rubio con algunas canas
Ambos hombres se separaron para prepararse, tenían que llegar a la escuela de su hija por una junta, Ambrosius era el que generalmente iba a estas porque Ballister daba clases, sin embargo, se tomó ese día libre para poder ir, ambos llegaron minutos antes viendo a los niños nerviosos fuera de su salón viendo hacia donde estaban sus padres
Mientras esperaban dos siluetas se les hicieron conocidas y al acercarse notaron que eran Jessica y Fabiola, las respectivas parejas se saludaron y hablaron mientras la puerta se abría, una vez entraron subieron las escaleras y entraban al salón junto a sus hijos
Cristine veía como sus padres se acercaban y le deseo buena suerte a su primo Hugo, la pequeña entro tomada de las manos de sus padres, la pequeña se sintió orgullosa, ya que murmullos de padres e hijos se escuchaban alrededor de ellos, los padres hablando sobre las acciones de ambos hombres especialmente del Capitán del departamento de Agentes DEA, Ambrosius Pieldorada y por el lado de los niños sorprendidos al ver que Cristine realmente tenía dos padres
Los presentes escucharon todas las indicaciones de los maestros para después pasar a lo que todo alumno teme, la entrega de calificaciones, Cristine veía a lo lejos el nerviosismo de su primo, pero ella se encontraba tranquila porque tenía al mejor maestro, su papá Ballister
Al salir de la junta los mayores se acercaron a la otra pareja que estaba contenta con su hijo, Cristine tomo de la mano a Hugo y ambos corrieron a los juegos, después de un rato ambas familias se despidieron sin antes quedar en que casa se iban a ver para comer ese fin de semana
—¿Creo que alguien merece un regalo?—Menciono Ambrosius haciendo sonreír a su pequeña
—¡Pizza!—Ballister sonrió melancólico ante lo dicho por su hija, lo decía de la misma manera que Nimona, la familia paso a comprar la pizza escogida por la menor antes de llegar a casa, una vez ahí se sentaron a comer cuando alguien llamo a la puerta, Ambrosius se levantó y al abrir sonrió, Ballister frunció el ceño, Ambrosius ya se había tardado, sin embargo, la confusión desapareció al escuchar una voz muy conocida
—¡Jefe!—Cuando volteo vio a su pequeña Nimona que ya era todo menos pequeña, la pelirosa corrió para abrazar a su papá bajo la atenta mirada de sus amigos
—Decidimos darles una sorpresa—Ballister sentía que podía llorar ahí mismo de felicidad, Nimona se separó del abrazo para saludar a su hermana, decidió tomar un pedazo de pizza, pero su cara cambio de felicidad a desagrado para luego señalar a su hermana—¡Me has traicionado, como es posible que estés comiendo pizza con piña!—Nimona fingió morir por la decepción causando la risa de su hermana y que Gloriana girara los ojos, Ballister llevo a su hija y a Gloriana a la habitación de la pelirosa para que durmieran ahíDespués llevo a Gwen y Miles a la habitación de invitados para después ver donde dormiría Hobbie
—Mire jefe, yo puedo dormir en un sofá y no hay ningún pedo—Soltó mientras afinaba su guitarra, Ballister sonrió cuando su pequeña corrió a lado de Hobbie para escucharlo tocar
La tarde cayó y todos los invitados se escondieron cuando escucharon que Alan llegaba, permanecieron así por unos minutos antes que Nimona saliera para abrazar muy fuerte a su hermano, ambos empezaron a hacerse bromas como cuando eran pequeños para después todos los presentes jugarán distintos juegos de mesa
Después de tanto todos consiguieron una familia amorosa e inconscientemente numerosa, la pareja de esposos se encontraban plenamente felices
"Después de todo mi vida no fue una completa mierda" Pensó Ballister antes de besar los labios del amor de su vida mientras sus hijos peleaban como si aún fueran unos niños de 7 años
Fin.
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Holaaa.
Aquí el ultimo capítulo de esta historia.
¿Algún cabo suelto que no resolvi o que me faltara?, para dedicarle un capítulo entero.
¿Qué les parecio el final?, si por mi fuera jamas acabaria.
Espero haya sido un buen final ya que no soy bueno escribiendolos.
Ahora me dedicare a la otra historia que publique, para los que no saben es la misma pareja pero Omegaverse, si gustan pasar a leerla y apoyarla se los agradeceria mucho.
Gracias a todos los que apoyaron esta historia, sus comentarios y me gusta me inspiraron a seguir, de verdad de todo corazón gracias por seguir esta gran aventura.
Nos vemos, tome agua, bye.
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¿Tú Y Yo? [Ballister X Ambrosius]
Hayran KurguBallister es el mejor amigo de Ambrosius desde la Universidad, sin embargo, otro tipo de sentimiento nació mientras el tiempo pasaba ¿Será amor? ¿Ambrosious sentirá lo mismo que él? ¿Ballister hará lo posible para hundir aquel sentimiento o estará d...