El Mundo Shinobi y el Fénix

Capítulo 21 Pequeño festival

-Han pasado tres semanas y aún no logras hacer el Jutsu de invocación. ¿Crees que estoy para perder el tiempo, niño?

-¡Oiga! ¡No es mi culpa que usted no me dé seguimiento en mi entrenamiento! Debe de haber algún truco, algún consejo.

-Muy bien, si eso es lo que quieres...

El Sabio de los sapos llevo a Naruto hacer un par de actividades antes de dar el último paso para la invocación. Antes que dijera alguna otra cosa el rubio yacía desmayado por un golpe que Jiraya le dio.

-No es nada personal. Es parte de la función. -Cargo al rubio.

Xian que estaba de paso para llevar lo último de sus pertenencias del campamento hacia aquella vivienda, vio todo lo sucedido a lo lejos. -¿Que? ¿Ese es Naruto? -Se escondió entre los arbustos y los siguió.

-Esto es algo que debo hacer niño, de lo contrario... nunca podrás aprender nada. -Después de dejarlo en el suelo este pequeño recobro la conciencia.

-¿Por qué hizo eso?

-Menos quejas... Más agradecimiento.

Naruto por un pequeño golpe de Jiraya fue lanzado hacia un vacío, tenía que hacer algo, un Jutsu de invocación era lo que tenía que hacer, la desesperación fue de poco en poco centrándose hasta sus más profundos recuerdos, pensamientos, todos los nombres y personas que no le hicieron a un lado fueron pasando delante de sus ojos, sin embargo, su espíritu de sobreviviente y un poco temeroso resurge y centro su Chakra para el Jutsu.

-¡Oiga! ¿Como puede hacerle eso a un niño? -La chica salió de entre los arbustos y lo confrontó.

-Vaya, ya empezamos con las confrontaciones de que está bien y de que está mal. -Cuando volteo a ver a la doncella quedó pasmado. -¿Pero qué es lo que están viendo mis ojos? -Enseguida pensó.

-¿Y cree que tirándolo desde aquí está bien?

-Bueno, señorita. Debo decirle que es necesario hacer esto. Creo que no sabe la condición por la cual lo hice.

-No me queda para nada claro.

-Escucha, podrás ser muy hermosa, pero no lo entenderías. -Se cruzo de brazos.

-Si me lo explica podría hacerlo. -Comenzó a irritarse.

-No puede ser, es otra de las chicas que están siendo irritantes.

-¿Que dijiste?

-Nada. Escucha bien, ese niño tiene potencial, y necesita desatar ese poder, controlarlo y usarlo a su favor con buen principio sin corromperse. Solo le di una mano.

-Está bien, ya entiendo tu punto. Pero es demasiado. A esta postura, yo no puedo hacer nada. Por más que tenga razón o no este hombre... No puedo interferir. Esto lo puede hacer, yo... creo que, si puede hacerlo, si está en un punto crítico de la muerte entonces iré por él.

-¡Jutsu de Invocación! -Se escucho en ese vació tan oscuro.

-Así que lo logro... este niño cada vez me sorprende. -Dijo aun teniendo los brazos cruzados. -¿Ves? A la próxima, ten más fe en él...

-¿Lo...logro? -Una sonrisa invadió el rostro de la chica, iluminando sus ojos con ese brillo alegre. -Que alivio, lo ha conseguido. Naruto... eres capaz de muchas cosas sin duda.

-Bueno si me disculpas... -Corrió para esconderse del jefe Sapo.

-Oye, ¿lo vas a dejar solo?

-Este ya no es mi problema.