Capítulo 46 Actitud evidente

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Después de ese momento dulce con la flor que se le dio a Xian, Kakashi camina poco más detrás de ella analizando sobre lo que paso y el porque lo hizo. Cada vez es más complicado que el ninja niegue lo que siente, siente que en cualquier momento se volverá loco. Pakkun y otros Ninken notaban a su dueño más distraído de lo normal, por lo que era algo evidente que el mismo Guerrero Sharingan este sintiendo algo nuevo a casusa de alguien en específico. La mirada del ninja plateado por momentos se desvía hacia ella, viendo su silueta caminar junto a Guruko y Uhei ajenamente.

-Oigan chicos. -Llamo en un susurro Pakkun. -¿Ya vieron como esta Kakashi? Parece estar perdido, diría que mas de lo usual. No es por nada, pero creo que es por cierta... princesa que va al frente.

-Si. -Añadió Shiba con una sonrisa. -Desde que es protector de ella se han estado volviendo más cercanos entre sí. Aunque hace tiempo veo que actúa raro.

-Es evidente que Kakashi no deja de pensar en Xian. -Suspiro Bull, siendo bastante directo. -Sabemos que tiene luchas internas que jamás va a decir, lo que me intriga es la razón. ¿Podría realmente Kakashi estar afectado por la princesa? Solo miren como la mira.

-Oye, Kakashi. -Trotó hasta quedar a lado de él. -T encuentras bien? -Kakashi solo atino a alzar los hombros sin mostrar mucho de su tormento.

-Si, lo estoy. Solo... pensando.

-¿Pensando? No creo que sea por tu libro. ¿Quizá en alguien en particular? Tal vez... ¿en aquella doncella que va al frente? -Insinuó Shiba. Viendo como el rostro ese hombre se torna rojizo.

-No se dé que hablas, Shiba. Solo... estoy pensando en toda la situación de antes. Ya saben, la Hokage y ella.

No están convencidos los perros ante esa explicación tan ambigua. Intercambiaron miradas y sonrisas cómplices como si supieran detrás de esa fachada de su dueño, algún secreto muy escondido.

-Estas mas distraído de lo normal. Usualmente con estas caminatas tomas tu libro pervertido y ni eso. ¿Qué te preocupa de la princesa? -Dijo con cierto toque de picardía.

-En serio... ¿de qué demonios están hablando ustedes? -Su voz lo traiciona, salieron esas palabras con temblor en ellas, además de que sintió como su cuerpo se estremecía ante la mención de la princesa.

-Basta ya, Kakashi, no te hagas el desentendido. Sabemos que algo te pasa, pero no lo vas a admitir fácilmente.

-A nosotros no nos engañas. -Comentó Shiba dando un salto hacia Kakashi para impedir su paso.

-Llevas toda la tarde actuando extraño desde que le diste la flor.

-Error. Desde que es su protector. -Corrigió Bull. -Eres mas atento, esas miradas que le lanzas tan furtivas no pasan desapercibidas, crees que nadie se da cuenta, pero no es así. Lo haces obvio.

El ninja que copia soltó un suspiro exasperado, sintiendo como de a poco lo acorralan sus amigos caninos con el tema. Su rostro arde de vergüenza sin saber que decir exactamente, sin embargo, intuye que sus queridos canes ya sospechan mas afondo sobre su lucha interna sentimental que refiere a ella.

-Están exagerando. Solo me encuentro distraído por tanto que ha pasado. Es todo.

-Aja, claro, claro. Por eso no puedes dejar de mirarla. ¿verdad?

-Shiba, por favor. -Trago saliva con dificultad. Es peor la situación mientras pasan los minutos. -Estos no me van a dejar en paz. Y al parecer soy muy obvio... creo.

-Oh vamos. No somos peros tontos. Que si ella gira a hablarte ahora vas a estar mas nervioso, te lo apuesto.

-Quizá...deberían callarse un rato. -Los fulmino con la mirada. Lo malo, es que sus amigos peludos no lo dejarían, así como así.

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