El Mundo Shinobi y el Fénix

Capítulo 36 Rosa Azul

-Es agradable este día, ¿verdad?

-Ya era hora de alejarse un poco de la aldea. -Comento Kakashi recostado en el césped.

-Fue una semana ajetreada. Pero ha sido gratificante.

-Sin duda. -Incorporándose un poco miro hacia el horizonte. El viento recorre cada parte de sus pieles a la luz suave del sol. -Hoy también será un poco ocupado, valdrá la pena eso es seguro.

-Aún recuerdo cuando llegue. Se siente cada vez como si fuera un hogar para mí está aldea.

-Si desde esos enemigos tuyos que casi nos invaden en plenos exámenes Chunin. Ha pasado mucho desde entonces. Al menos ahora sabemos que tus intensiones son buenas y que podamos tener tu apoyo.

-Es verdad. -Asistió con una tenue sonrisa.

-Pero al final fuimos invadidos por Orochimaru. Puedo decir que prefiero que sea un enemigo nuestro y no por ti o los otros. No sabemos a qué nos enfrentamos solo tú puedes saberlo. Es gratificante saber que estás de nuestro lado. -Miro de reojo a la doncella, su perfil por la luz de la mañana le traía calidez.

-¿Cuantos enemigos tienen?

-Eso es algo que ni nosotros sabemos, alteza. Pueden ser solo unos cuantos o hasta todo un ejército.

-Si, fue una pregunta tonta.

-No lo fue. Descuida.

El silencio fue prolongado con el paisaje que tenían frente suyo de la aldea, hasta que fue roto por la voz de Kakashi.

-Xian. Te he hecho una promesa y la voy a cumplir. -Giro su rostro con una sonrisa bajo su máscara. -Después de las actividades de la academia iremos a explorar. ¿Qué te parece?

-¿Así que eres hombre de palabra? -Alzo una ceja divertida.

-Se hace lo que se puede. -Le sigue el juego.

-Entonces no eres de muy fiar.

El hombre ríe suavemente levantándose de su lugar.

-Yo no diría eso Princesa. -Le extiende la mano con suavidad, al tomar su mano y quedar frente a frente su rostro fue honesto. -Depende de la situación y de quienes tratan de fiarse de mí. Si son enemigos, conocidos... Depende.

-Mmm, tiene lógica lo que dices. No siempre, hasta los más cercanos son traidores. -Alzo dijo con un dejo de nostalgia.

-Es correcto. Tú y yo lo sabemos muy bien. Es por eso que quiero confiar más en ti. -Aun no suelta la mano de la doncella, su pulgar acaricia el dorso de su mano. - ¿Que estoy haciendo? Una parte de mi se niega, pero la otra quiere... Continuar... Si me conocieras un poco más, quizá podrías entender muchas cuestiones de la aldea y el por qué somos como somos.

-Eso hago. No sólo contigo, es con toda la aldea. Conocerlos, poder ayudar aquí. Ser de confianza.

-Poco a poco. Verás que hasta la Hokage será como una amiga. -Sonrió con tranquilidad.

-Eso espero, sobre todo con ella.

-Aléjate. Bueno, debemos irnos. Iruka debe estar como loco, ya sabes cómo se pone. Todo con el tiempo se podrá resolver. A veces.

-Es cierto. -Sonrió con energía renovada.

Últimamente Kakashi tiene conflictos internos a cerca de la doncella. Desea su cercanía, se siente cálido cuando está con ella, siente que puede ser él mismo sin su mascara de indiferencia como con otros. Es más suave con ella y cuando ve su sonrisa siente el corazón que se le saldrá de un golpe. Aunque no lo acepta, no acepta que este sintiendo algo más cálido, rechaza toda posibilidad. Y por ende... La doncella es ajena a todo, aunque empieza a darse cuenta de la cercanía que hay entre ellos más no lo que siente, porque igual encasilla todo sentir. Uno, no da otro paso por su orgullo y faceta de ninja. El peso es muy grande y no lo va admitir; Xian por su parte, el miedo de ser traicionada o herida le pesa en su conciencia y corazón, recreando aquellas veces que le han hecho una mala pasada. No siempre fue por traición, sino por perdida, por amor.