En El Foco [Simon "Ghost" Riley]

Capítulo 20

   Suspiras con pesadez cuando entras a otro pasillo como el anterior, el cuál fue más difícil de encontrar que antes, agotando tu energía más de lo que imaginabas.

— Vamos, ya nos queda poco— anima Simon cerrando la puerta del pasillo.

    Vuelve a encender la linterna y camina delante de tí hasta la puerta del fondo, Ghost abre con cuidado.

— Mo Dhia!— grita Soap cuándo os ve, bajando su arma—. Pensé que eran enemigos.

— ¿Has visto movimiento?— pregunta Ghost.

— Sí, creo que eran los japoneses.

— Bien, démonos prisa — Simon te indica con la cabeza que te acerques a los ordenadores y hagas lo tuyo.

   Asientes con la cabeza y te inclinas sobre el teclado, en busca de desactivar la bomba.

— Bien— Soap se aclara la garganta—, ahora que estamos solos ¿Qué se traen ustedes entre manos?

   Miraste de reojo a Simon, quién te devolvió la mirada de la misma forma.

— ¿De qué estás hablando?— preguntas centrada en la pantalla.

— Bueno... ya sabes— inquiete MacTavish de forma miliciosa.

— Cállate, Soap— ordena Ghost sin querer prestarle atención.

   Niegas con la cabeza con una ligera sonrisa y continúas manejando el ordenador.

— Bien, esto ya casi está— informas llegando a la última pantalla de carga.

    Unos golpes lejanos os hacen estremecer y todo empeora cuándo unos gritos empezaron a sonar en el interior del pasillo.

— Japonés— murmuras. Tus ojos abriéndose en pánico.

— Johnny, ayúdame a bloquear la puerta — ordena Simon acercándose a una estantería.

   Soap asiente y ayuda a su compañero a bloquear la puerta con el mueble.

   Tratas de centrarte en la pantalla y una sonrisa crece en tu rostro cuando consigues anular el misil.

   Antes de que puedas gritar en victoria, Simon cubre tu boca y te arrastra detrás de los ordenadores.

— No hagas ruido— susurra en tu oído—. No salgas de aquí, ¿Entendido?

   Asientes ligeramente nerviosa, sabiendo que la situación era más grave de lo que parecías ver.

   Simon te mira, notas sus cejas moverse de preocupación bajo la máscara y se aleja de tí.

   Lo ves colocarse a un lado de la puerta, se escuchan unos golpes y la estantería tiembla.

— Price y los demás vienen en camino, se han encontrado con unos aliados— informa MacTavish en voz baja—. Tenemos que aguantar.

— Guarda todas la munición posible, no sabemos cuántos son— responde Simon de la misma forma.

   Notas tu cuerpo estremecerse y tratas de hacerte más pequeña detrás de los ordenadores, maldiciendo de nuevo tu idea de ir a Smeavania.

  Respiras hondo para calmarte, sabiendo que era lo correcto.

   Unos golpes más te hicieron temblar, pensaste que era tu propio corazón a punto de salir de tu pecho, pero el estrepitoso sonido de la estantería siendo movida hasta caer contra el suelo te sacó tus esperanzas.

   Ni siquiera te atreviste a mirar cuando las balas y los gritos empezaron a sonar por la sala, simplemente te hiciste todo lo más pequeña posible y te cubriste con los brazos.