Ayla

12

Capítulo 12

Malik Sallow

-Necesito que me ayuden a investigar todo sobre ella, de donde viene, quienes son sus padres, donde ha estado a lo largo de sus veinticinco años, lo quiero todo.

- ¿Por qué la necesidad? – hay un brillo esperanzador en su mirada.

-Porque hay algo extraño en ella, que me impide aceptarla.

- ¿Porque es humana? – Miles no es el tipo de persona que le agrade hacer este tipo de trabajos, pero jamás pondría en duda una orden de su alfa.

-No, es algo más, he intentado todo este tiempo acercarme, hacer lo que Asim me ha pedido, pero cada vez que estoy cerca de su habitación solo puedo sentirme enojado, con la necesidad de alejarme.

-Además, es imposible tener como mate a un humano- le recuerda su mejor amigo- te lo dije, debe tener sangre de lobo, alguien en su familia lo fue, aunque ella no sea cambia forma.

-Es lo que debemos averiguar- la duda sobre el origen de la joven es el misterio que ocupa su cabeza en este momento, los ataques habían cesado en estos últimos tres meses, dejándolo un poco más tranquilo, así que se concentró en su compañera – Llamaré a la sacerdotisa del aquelarre vecino, tal vez nos puedan ayudar.

- ¿Meterás a los brujos en esto? – su beta tampoco era fiel creyente de la magia, aun y cuando él mismo era un hombre lobo.

-Necesitamos salvaguardas nuevas, no han atacado la manada en un tiempo, pero no dejaré a los nuestros expuestos, los protegeré a toda costa – Miles se remueve incómodo – así que sí, los brujos estarán involucrados, espero firmar un acuerdo para incluir su territorio al nuestro, así podremos protegernos mutuamente.

-Como ordene, alfa- hace una ligera reverencia, sale a cumplir con sus órdenes.

-Es muy diferente a su hermana- Duncan sigue viendo por donde se fue – la extraño- su sensibilidad era algo que no toleraba cuando niños, pero que agradecía infinitamente ahora, su lugar como omega de la manda le ayudaba a mantener todo en equilibrio.

-También la extraño- su mejor amiga habría sido la primera en llamar a los brujos, siempre deseo poder hacer magia como ellos – los gemelos están por cumplir dos años, y solo preguntan por ella.

-Deberías dejarla salir, estoy seguro de que Ayla los extraña también.

- ¿Quieres arriesgarte a que vuelva a escapar?

-No lo hará, solo llévala con los cachorros – ignora lo que le ha dicho, poniendo fin a la conversación – como sea, terminaré los preparativos para la ceremonia de transformación, no llegues tarde.

-Jamás lo hago – vuelve su atención a los asuntos de la manada, respondiendo cartas de alfas de las manadas cercanas.

...

La ceremonia de transformación se realizaba en el lago Luna Blanca, dentro del territorio, era para los lobos jovenes que recibirían su primera transformación en la primera noche de luna llena después de su cumpleaños número dieciocho, esta vez doce jovenes de la manda estaban listos para recibir a su lobo.

Debían esperar a que la luna llegara su punto más alto, que su luz los tocara, así comenzaría todo, los jovenes estaban acompañados de su familia, los altos mandos, entre ellos su alfa, quien sería el encargado de controlarlos en caso de ser necesario.

Los llantos y gritos no se hicieron esperar, transformarse por primera vez, era sumamente doloroso, cada hueso del cuerpo debía romperse para adoptar su nueva forma, tenían que aprender en ese instante a controlar su nuevo cuerpo, evitando ceder todo el control a su lobo interior.