CAPÍTULO 8

264 42 6
                                    

Narra Cole

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Narra Cole.

Zane ya había llegado con muchos peces para que pudiéramos hacer el desayuno, la comida y tal vez la cena y aunque sea descansar un poco mas de tiempo para ahora si partir mañana. Este mando a su halcón a explorar todo el perímetro para así poder guiarnos por el camino menos peligroso de ser posible.
Y mientras esperábamos _________ nos contó un poco de su vida. Como aquel día que la llevaron ante Erina para que pudiera curarla de su enfermedad, de sus padres y en la bella y próspera aldea donde ella quería dedicarse a cultivar arroz tal como sus padres. Sinceramente yo no sabia si creerle del todo ya que, su voz su sonaba tan sincera con nosostros, ¿pero entonces por qué ese hombre nos había contado otras cosas?. Al mirarla bien, era una joven pequeña, totalmente destruida por la forma que me miró o miro a Zane, llena de cicatrices y con un profundo terror por cualquier ser, humano o no.
Por la noche cuando ya habíamos cenado, Zane se levantó de su lugar y de su abdomen saco nuevamente una venda.

— Te cambiare el vendaje ahora que ya descansaste.— le informó mi amigo, siendo amable como siempre.

— No es necesario Zane. — dijo con una sonrisa quitándose el vendaje para mostrarnos su brazo —. Ya ha sanado por completo, puedes revisarlo.

Y en efecto, cuando Zane la escaneo ya no estaba la fractura. Ahora que era testigo de lo que podía hacer, entendía perfectamente porque ellos dos la querían con desesperación, esta joven era capaz de curarse y curar a todos en tan solo unos minutos o incluso pocas horas, era alguien especial al final de cuentas que podía ser alguien muy útil y ser utilizada en muchas cosas para beneficio propio. Maldición.

— ¿Ellos te hicieron mucho daño no es así. — preguntó a lo que ella solo asintió mirando el suelo —. Cuántos años, estuviste ahí?.

— Estuve tal vez diez años ahí encerrada. — dijo —. Bueno, a mi me trajeron a este lugar cuando tenia ocho años, sólo era una niña.

— Nosotros fuimos enviados aquí, para llevarte con el porque Erina esta muy mal. — dijo Zane —. Ellos te necesitan.

— No, ellos no me necesitan. No por el momento. — aquello que dijo, no lo lograba entender —. Es decir, ella estará bien por lo menos unos meses, solamente finge para que regrese con ellos y primero muerta antes de volver ahí.

— Ya nos quedo mas que claro. — dijo Zane mirándome no muy seguro —. Entonces, ¿qué hacemos?.

No le respondí, sinceramente no sabia que hacer, esta muchacha puede que también nos este diciendo la verdad, de ser así el caso no creo poder seguir llevando acabo la misión, dudo que ella quiera volver por su voluntad.
Mire a Zane una última vez y salí de la cueva un momento, necesitaba pensar mejor las cosas.

Narrador omnisciente.

Si las cosas afuera ya eran extrañas, en el palacio de Vanger lo era mucho peor. No solamente a Jay y a Nya los vigilaban constantemente por el día, a la hora de la comida o cuando Nya y Jay exploraban los jardines y cada rincón del frío y desolado palacio.
Por lo que no les quedó de otra que ir a investigar en la noche cuando todos dormían y salir de sus habitaciones a través de aquellos pasadizos secretos que el castaño había descubierto hace algunas noches.

❝𝐀𝐋𝐋𝐈𝐔𝐌 [𝐂𝐨𝐥𝐞𝐗𝐋𝐞𝐜𝐭𝐨𝐫𝐚] (𝐍𝐢𝐧𝐣𝐚𝐠𝐨)❞ 𓇚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora