☆ Cap. 13

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El salón había sido una distracción para Jungkook, había olvidado el tema de su hermano y también de Momo, solo se dedicó a pintar el cabello mientras escuchaba historias de sus clientes así como le ayudó a hacer una tarea a Mia ya que la señora Hee fue por un retoque de su tinte. Cuando llegó la hora para ir al restaurante el chico tomó sus cosas y salió, dirigiéndose al lugar dicho, donde se encontró con sus compañeros de trabajo, Bibi y Yoongi, la chica llevaba trabajando gran parte del día por lo que en esos momentos su turno terminaba, sin embargo no se fue, esperaría a su hermano como todos los días. La tarde comenzó siendo agitada por lo que el par de amigos no tuvieron tiempo de conversar, fue hasta que terminaron de atender a la gente que había llegado que Jungkook pudo contarles a los hermanos lo que había pasado.

—¿Cuántos años dices que tiene?— Preguntó la chica.

— Veintisiete.

— Ah, tiene mi edad — Contestó. — Pienso lo mismo que tu Jungkook, tenía el derecho de irse pero no de desaparecer de tal forma.

— Entendemos tu reacción — Comentó Yoongi. — La verdad yo odiaría a Bibi si me hubiera dejado igual.

La chica rió y negó con la cabeza, acariciándole el cabello a su hermano.

— Soy una hija de puta pero no tanto como para dejar a mi mascotita — Jungkook rió un poco al escuchar sus palabras, volteando para ver a la entrada como siempre hacía para verificar si alguien nuevo llegaba. Así fue, pero era dueño de una cabello rosado que Jeon conocía muy bien y que lo hizo sonreír un poco, eso hasta que recordó lo que pasó con Momo esa mañana.

—¿Y qué piensan de lo de Momo? — Preguntó antes de que Jimin llegara con ellos.

—¿Quién es ella?—

—No debería de interesarte tanto la relación de Jimin a menos que ya sea algo muy grave — Opinó Yoongi. — Tal vez estaba demasiado consternada porque los vio durmiendo juntos y como tiene unas amigas de mierda que le llenan la cabeza de tantas cosas pues, creo que su reacción fue la más normal que podías esperar de ella.

Antes de que Jungkook pudiera decir algo, Park llegó con ellos, tomando asiento al lado del pelinegro, saludando a Yoongi y a su hermana.

— Hola — Contestaron al unísono.

— No tengo contexto pero eres un chico tan lindo que la entiendo — Habló Hyung Seo entre un bostezo. Jimin giró la mirada al pelinegro, notando como bajaba la mirada tímido ante aquel halago, haciéndolo reír. 

—¿Crees que hayan sido celos?— Preguntó Yoongi viendo a su hermana.

— No lo sé, cualquier persona se pondría celosa de Jungkook.

—¿De qué hablan?— Cuestionó Jimin, curioso.

— De nada — Contestó Jeon con rapidez. — Es mi rato de descanso, ven Minnie, acompáñame afuera.

El mencionado no se negó por lo que bajó del banquito y caminó atrás de Jungkook, quien lo guió a la parte trasera, antes de salir tomó una rebanada de pan del refrigerador para así poder comerlo juntos. Al llegar se sentaron en la banqueta, Jeon destapó el pan y comenzaron a comer en silencio por los primeros minutos, hasta que Jimin habló. 

— ¿Haz hablado con tus papás sobre eso? — Jungkook negó con la cabeza.

— Mi mamá estuvo muy ocupada y mi padre no me ha comentado nada — Contestó. — Se la pasó hablando de Seokjin en el salón, esta demasiado embelesada con el regreso de su primogénito.

— Si quieres puedes ir a dormir a mi casa otra vez, no hay problema.

– No Jimin, se te agradece pero no — Habló Jeon. — No puedo huir por siempre, además no quiero causarte problemas con Momo.

Lindo Arcoíris ☆ AU KM Donde viven las historias. Descúbrelo ahora