"Estaba mal.
Pero, ¿Dónde estaba realmente lo malo cuando jamás se había sentido tan vivo como en ese momento?
Buscaba en sus ojos la respuesta, en su piel suave y tersa, en el largo inmaculado de sus pestañas, en el arco naso de sus labios; pero...
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—Buenos días, Señor Jeon, ¿Cómo amaneció hoy? —
—Si vienes a preguntar por tu podadora, esa cosa no servirá, Jimin —El chico chistó.
—No no, no es nada de eso, solo quería hablarle un minuto —Jeon detuvo su andar como de costumbre, esta vez con una caja de herramientas en mano mientras se dirigía a la casa de TaeHyung.
—Tienes un minuto —Señaló.
—Es sobre TaeHyung —Jeon lo miró con desgana, Jimin esperaba más reacción que solo eso.
—¿Ajá? —Le instó a seguir cuando notó que se quedó mudo y él tenía bien poca paciencia.
—Pues, ¿No cree que es demasiado joven para usted? —JungKook se quedó perplejo, tanto así que le costó articular de nuevo, entender en un principio a lo que se refería.
—Perdóname, pero, ¿A qué te refieres? —
—Si, ya sabe, no tiene que fingir conmigo —Jeon alzó una ceja, no viendo el punto de aquello— TaeHyung me lo contó todo, lo del beso y ello. Pienso que es muy joven para usted, no debería tomarlo tan a la ligera —Jeon quiso reír, de verdad quiso reír al comprender todo.
—¿TaeHyung te dijo lo del beso? —Jimin asintió— Oh, vaya...—Asintió buscando las mejores palabras— Pues no sé qué tanto te habrá dicho porque entre yo y él no hay nada, porque me imagino que estás asumiendo que hay algo entre nosotros —Jimin se mostró nervioso.
—No bueno, es que es evidente, ustedes dos pasan demasiado tiempo juntos y luego pasa lo del lago... —Jeon se tomó el puente de la nariz entre los dedos, en definitiva estar entre tanto mocoso hormonal lo iba a volver loco, bien loco.
—Dale, para tu carro, Jimin. Ni siquiera sé porque te doy explicaciones pero lo único que tienes que saber es que yo con ese revoltoso no tengo nada no lo tendré, lo del beso fue mero impulso suyo y ya lo hemos hablado para que no se vuelva a repetir. Solo estoy trabajando para él y lo más importante de todo, ¿Qué te importa a ti lo que yo haga con mi vida? No es como que vayas a poder hacer algo de todos modos —Le dijo severo haciendo encoger al muchacho y sin esperar que le respondiera se alejó de allí rumbo a la casa de TaeHyung— Genial, se me acaba de arruinar el día —
Y es que por eso no se llevaba con nadie allí, todos parecían muy metidos en el pensar y actuar de todos, todos eran demasiado cotilla para ser verdad y eso a él le desagradaba a niveles críticos de ponerle el hígado negro. Simplemente no le gustaba que se metieran en sus asuntos, independientemente de lo que fuesen. Hablar con los vecinos representaba tener sus narices metidas en su casa y sus asuntos, sintiendo la suficiente confianza para señalarlo y cuestionarlo a diestra y siniestra como si le conociesen. Por eso él se alejaba de la gente, más como en este caso que eran personas mayores con costumbres de antaño que veían todavía mal una relación homosexual, peor sería la diferencia de edad. Nombre, lo podrían linchar por eso, ya lo imaginaba.
