En un cuarto , Kenichi y Taiga entraron a su habitación mientras seguían besándose con pasión, la castaña no lo soltaba es más, usó sus piernas y se aferraba a la cintura del pelirrojo mientras seguía besándose.
Taiga: He esperado esto, admito que me puse muy celosa cuando tuviste relaciones con Ravel, pero no soy como otras idiotas que se peleaban hasta por tonterías, quedamos en estar contigo y lo haremos sin complicarnos.
Kenichi: Eso es lo que me gusta. – dijo mientras cierra la puerta y siguen besándose, por momentos le besaba el cuello a la castaña, sacándole algunos gemidos
Taiga: A-Ahh... - inconscientemente enterraba sus uñas en los hombros del pelirrojo.
Kenichi: ¿Acaso toqué un punto sensible? – dijo burlón mientras que la castaña lo calla con un beso.
Taiga: Cállate y bésame. – ambos acercan sus labios nuevamente mientras caían a la cama y seguían con eso, seguido de una batalla de lenguas, la castaña lo miraba como una depredadora, pero el pelirrojo también hacía lo mismo.
Kenichi: ¿Dándome órdenes?
//==// Alerta de Lemon //==//
Taiga: Recuerda lo que me dijiste una vez... - dijo con una mirada amorosa. – "Desde tiempos remotos, el dragón ha sido la única bestia que ha podido igualar al tigre." A pesar de las adversidades, tú y yo seguiremos juntos ¿No?
Kenichi: Sí...- sonríe con sinceridad. – Tienes razón, mi bella tigre compacto.
Ambos nuevamente se besan mientras las caricias amentaban, la castaña pasaba su mano por la espalda del pelirrojo mientras que el Uzumaki llevaba sus manos a la cintura.
Taiga: Mmmm... Kenichi... - se separa para recuperar el aire mientras estaba con un fuerte sonrojo. - ¿Eh? – mira hacia abajo y se ruboriza mientras sonríe con lujuria. – Vaya, vaya.... – pasa su dedo. – Se ve que estás animado.
Kenichi: Gihee, se nota que tú también. – dijo al sentir la humedad en su entrepierna.
Taiga: Mmm... - lo besa de nuevo mientras mueve su cintura, haciendo que su intimidad frote con la virilidad del pelirrojo.
Sin que se dieran cuenta, Yami estaba espiándolos, asegurándose de que nada la moleste y observe el acto de la castaña y el pelirrojo.
Yami: (M-Mi cuerpo .... Está calentándose...Son cosas...pervertidas...pero...) – miraba cómo las manos de Kenichi acariciaban el trasero de Taiga, ella seguía provocándolo con el movimiento de sus caderas.
Taiga: Ahhh... - el pelirrojo estaba abriendo la blusa de la castaña quien hace lo mismo.
El calor en el ambiente si intensificaba, pasaron de quitarse la ropa de forma delicada a sacarla de un tirón, eso fue lo que hizo el pelirrojo la mire.
Taiga: Perdón que no sean grandes. – respondió algo desanimada pero el pelirrojo besa su pezón. - ¡HYAAA!
Para Kenichi eso era irrelevante, tengan grandes o pequeñas proporciones, él tomaba más en cuenta los sentimientos que lo físico, algo que sí valora y lo diferencia de su "hermano".
Kenichi: ¿Esto te levanta el ánimo? – dijo mientras pasaba una mano por las nalgas de la castaña mientras que volvía a besar sus pechos, sacándole algunos gemidos.
Taiga: L-Lo chupas mu...fuer....fuerte... ahhhh.... – abraza la cabeza del pelirrojo mientras se dejaba llevar.
Yami seguía mirando mientras empezaba a acariciarse los pechos, los de ellas eran más grandes y empezó a imaginarse que el pelirrojo hacía lo mismo, llevando de forma inconsciente sus manos a su pecho, sacándole un gemido.