Cieguito

Un nuevo don, un paso adelante

Les dije: Siembren ustedes justicia y recojan cosecha de amor. Preparen la tierra para un nuevo cultivo, porque es tiempo de buscar al Señor, hasta que él venga y traiga lluvia de salvación sobre ustedes.
{Oseas} 10:12

— Reynald: ¿Cuánto dirías que amas del 1 al 10, que amas a tu prójimo Julio?

— Julio: Yo nunca lo he podido ver así, los números son casi todos iguales para mí; Pero 5 o 6, a veces 7 u 8.

— Reynald: Muy bien, has contestado bien. Cuanto mejor comprendas el amor mejor será tu vista; Jesús por ejemplo, ama al pecador cuando se arrepiente, pero aborrece a los orgullosos cuando no quieren arrepentirse.

— Talía: Reynald, pero he escuchado que Dios nos ama a todos, ¿por qué aborrecería a alguien por no arrepentirse?

— Reynald: Es como cuando tienes un hijo Talía, y ese hijo hace justamente lo contrario a lo que tú le dices y has dicho ya que no haga. Tú lo amarás, pero aborrecerás que él hace esa acción que se supone, que NO DEBE hacer.

— Talía: Reynald, ¿qué es descarriarse? porque me pasó por la mente ahora.

— Reynald: Es parecido a lo que digo, es ir tras las cosas que deseas que no agradan para nada a Dios, por ejemplo: Adorar dioses extraños, rendir culto a imágen, poner confianza en algún idolo como el dinero, o incluso tu propia inteligencia... El foco de Dios, es que por favor, no seas llevado de un lado a otro, para que al final te des cuenta que sólo con Jesús, nuestro Dios es que se obtienen en verdad resultados.

— Talía: Tengo una amiga, siempre, me cuenta que estuvo tomando. A veces siento como si hasta me lo dijese para que yo me ponga a hacer las mismas cosas. Pero mi papá me decía que el alcohol no es bueno, y que al tomarlo, me entrego a la necedad y no estaré siendo sabia; Me recalcó: Nunca lo hagas, por favor Talía, mantente pura y resplandecerás.

— Reynald: Tu resplandor proviene de ello, y no de nada externo. Por eso como les decía, el corazón es el mejor visor del ser humano. Si tú tomases alcohol, tu corazón se desviaría, serías como una oveja muy alejada del redil, y para tu propio mal, porque, una vez regreses, querras volver a tomar. Es una bebida adictiva... Y creo que tú misma puedes contestarme: ¿Son buenas las adicciones?

— No. Totalmente creo que no lo son.

...

Hasta ahora pareciese que tendré que estudiar toda una biblioteca para entender lo que Reynald me mostrará. Incluso siento como si plantea devolverme la vista. ¿Será posible? (pregunta Julio para sí).

Talía se siente cómoda, y eso me hace sentir bien. No le pedí a Dios más nada que ella, siempre se mantenga siendo humilde, sencilla y amorosa conmigo.

...

— Julio: Reynald, ¿qué pretendes? ¿Cuál es tu meta?

— Reynald: ¿Qué es lo que mas quisieras que yo haga junto a Jesús por tí?

— Talía: Nosotros diríamos que,  lo ayudes a ver nuevamente.

— Reynald: Así es. Justamente para éste día Jesús me ha preparado hasta ahora.

— Julio: Podemos... Por favor, repasar porque ésto parece hasta poco creíble e imaginense para un ciego como yo.

— Talía y Reynald: Jajajajah.

— Reynald: Totalmente, jeje... Temer a Dios y ayudar a los demás limpia tus caminos.

— Julio: ¿Cómo ayudo a los demás? y ¿Qué significa temer a Dios?

— Reynald: Antes de decirte ambas cosas, te diré que es mejor que siembres en tu corazón una semilla... Y que creas en Jesús. Jesús lo dijo así:
"De cierto os digo, que el que cree en mí, rios de agua viva brotarán de su corazón".

Entonces el mayordomo dijo para sí: "¿Qué haré?, porque mi amo me va a quitar la mayordomía. Cavar, no puedo; mendigar, me da vergüenza.
Lucas 16:3

— Talía: Hará él algo vergonzoso, Reynald?.

— Reynald: Jesús dormía en el suelo de las calles de Galilea tal vez, y dime Talía ¿no era vergonzoso?.