Strawberries and Cigarettes [JICHEN]

Love u forever ♡

Anoche había sido cansado y durmieron tarde, pero no por la razón que hubiera querido.

Trabajaron como el antiguo equipo que eran en la cámara carnada que propuso el pelinegro. Jisung sabía más de electrónica así que el solo programó el sistema para verlo desde la pc, pero aún así se llevaron horas. Era él quien salvó algunos momentos con sus preguntas e insinuaciones sutiles pero tampoco era un robot y se agotó para aguantar su propio ritmo.

Jisung normalmente no se veía cansado porque su expresión no cambiaba mucho mientras trabajaba pero sin duda también lo estaba.

Cuando quedaron seguros que el anzuelo estaba listo, se marcharon a la casa Park. Era pasada la media noche así que el resto de los inquilinos estaban durmiendo.

Jisung ofreció su cama de inmediato y él continuó con la hazaña desde su escritorio. En un principio, el pelirosa prometió permanecer despierto para acompañarlo a detectar al susodicho pero una vez se puso un conjunto con playera y pantalones cortos que el dueño del la pieza le prestó como pijama, acomodó un lugar en la cama y se enredó entre la cobijas, quedó completamente dormido hasta la mañana siguiente.

Se despertó estando en la misma posición y observó el escritorio vacío del coreano, se giró en su lugar pero tampoco estaba en la cama. Ni siquiera sabía si durmió.

Soltó un bostezo grande y vio el techo, todo estaba muy silencioso.

Recordó que había sido una sola vez la que durmió en los aposentos del pelinegro pero ahora la vibra era diferente. Es decir, no había etiquetas de una relación pero sentía pertenecía, a las sábanas, al olor, a las almohadas... sentía que adueñarse estaba bien.

Una leve sonrisa se formó mientras su mente lo llevaba volando a los días con Jisung. No hablando solamente de estos últimos, también de los que sucedieron antes de distanciarse. Definitivamente esa historia de amor era nueva para él, jamás había pasado por un enamoramiento tan genuino y hasta cierto punto ingenuo. Porque se le ocurrió enseñarle los sentimientos a un casi veinteañero atrapado en el cuerpo de un niño que descubre mariposas en el estómago cuando ve a la niña más bonita de su salón. La cosa más difícil e ingenua que pudo hacer en su vida pero sin duda no podía arrepentirse. Sentía que tenía tatuado a Jisung en su corazón para siempre y si algo no volvía a salir bien; sabía que se quedaría ahí.

Quiso removerse un poco más para alimentar su delulu antes de levantarse. Un fuerte suspiro lo puso pies en el piso y también se detuvo a ver los póster del idol que le gustaba a su hacker. No podría estar celoso, pero si anhelaba que en su escritorio hubiera una foto de ellos.

Cuando terminó, le echo un vistazo a su móvil que desde ayer que empezaron a trabajar lo botó; había mensajes de Renjun y Lia, olvidó que les dijo volvería. A ver qué excusa utilizaba esta vez.

Viendo la hora pensó que no era tan tarde y probablemente se encontraría a mamá park y el pequeño Jiwhan así que fue directo al baño que estaba en la siguiente puerta del pasillo y parecía vacío.

Cuando salió después con el rostro limpio, el sonido de probablemente una licuadora lo hizo dirigirse a la cocina; trato de ser silencio y se asomó de a poco.

El susodicho era su pelinegro favorito, de espaldas, sin camisa y con su 1,80 sobrepasando los gabinetes superiores de la cocina. Parecía estar concentrado en lo que hacía y con cierta curiosidad pero sin ganas de perturbarlo, dió pasos de puntillas para tener un panorama más amplio.

Definitivamente estaba preparando su bebida rosa  favorita y parecía ser un desastre pero el resultado no se veía mal.

Una enorme sonrisa le provocó y quiso apachurrarlo de lo lindo y atractivo que se veía.